Los seres humanos creamos cultura. Nuestras formas de pensar, de sentir y de actuar, la lengua que hablamos, nuestras creencias, la comida y el arte, son algunas expresiones de nuestra propia idiosincrasia, de nuestra forma de ser, de la identidad de cada pueblo, de cada lugar.
¡¡ Venga, despierta, levántate, ya se les escucha….!! Aún la oscuridad era la dueña de las calles, las primeras luces del alba tardarían en aparecer y el silencio de la noche se rompía por unas profundas voces que entonaban el “Ave Maria” acompañados por el retoque tenue de una campana.
Tendría cinco o seis años. Y a la llamada de mi madre, doy un salto de la cama y junto a ella, las dos, sintiendo aún el frio propio de la madrugada pegábamos nuestras caras al cristal de la ventana, cuyos cristales se llenaban del vaho de nuestros alientos, dejando una película, un halo misterioso que limpio con mi mano, despejando así la húmeda bruma que deja nuestros propios alientos, deseosa y esperando ver la primera luz, era la de una farola de mano de quien abría aquel cortejo callejero que recorría las oscuras calles de El Palo.
Mamá, ya vienen, ya les veo; mira, mira…..chiiiiiisssss, calla y escucha me decía mientras pasaban por delante de nuestra casa la procesión de los devotos, divididos en dos filas, en perfecto orden, con velas encendidas en sus manos, pasaban con paso lento, con recogimiento y devoción alternando los rezos con ése canto cadencioso y sempiterno que quedó grabado en mi memoria, recuerdos de aquellas madrugadas: Santa, Santa Maria, madre de Dios, ruega por nosotros, por nosotros………..Era el “Rosario de la Aurora”
He podido leer que en todas las civilizaciones y culturas se ha rendido culto a la “aurora” de la mañana como símbolo de la personificación de la claridad antes de la salida del Sol. En la mitología griega Aurora es la diosa del amanecer, represenada como una joven que alumbra con una antorcha; en la romana es la deidad que personifica el amanecer igualmente e incluso en la cultura judía, la Aurora representa el poder de la victoria de la luz sobre la oscuridad de las tinieblas.
Los estudiosos han ido demostrando que todas éstas concepciones fueron adoptadas por el cristianismo, haciendo una adaptación simbólida, considerando la figura de la Virgen Maria Aurora-Rosario, fundiendo ritos ancestrales y creencias diferentes con las creencias de la religión católica.
Creencias arraigadas profundamente en Andalucia, fue en el siglo XVII cuando se iniciarion los “Rosarios de la Aurora” por el religioso capuchino fray Pablo de Cádiz o por fray Pedro de Ullosa, extendiéndose la tradición por cada rincón, por cada pueblo.
En la provincia de Málaga, concretamente en Alhaurin el Grande, la tradición de rezar el rosario de la Aurora se hunde en las raíces de su pasado y se conserva como seña de identidad propia los llamados “Mulliores”. Los “mulliores” son un grupo de personas, una hermandad, cuya finalidad es cantar recorriendo las principales calles del municipio, los misterios del Rosario durante las madrugadas, acompañados por instrumentos tradicionales. El nombre de Mulliores, les viene probablemente aludiendo a los Muñidores de las antiguas cofradías, encargados de tocar la campanilla anunciando el inicio de los cultos.
Alhaurín el Grande, Lauro Nova para los romanos y Al-Haur para los árabes. Estos últimos la llamaron así, la tierra entre dos valles, el lugar donde se sitúa esta bella localidad malagueña, que se eleva 239 metros sobre el nivel del mar para contemplar un pequeño valle que se extiende por el Sur hacia la Costa del Sol y, por el Norte, en búsqueda del Valle del Guadalhorce, todo ello bajo la protección de la Sierra de Mijas.
Es allí donde se hunden mis raíces paternas, donde nacieron mis abuelos Diego y Antonia, donde nació mi padre. Ellos, mis abuelos y sus hijos (mi padre y mis tios) nos transmitieron a toda la familia ése amor, ésa pasión por ésa tierra que les vio nacer, sus costumbres, sus tradiciones, su cultura y su gastronomía se arraigaron también en mi vida, en “Mi Cocina”. ¡¡ Quién sabe, si ésa tradición de rezar de madrugada el Rosario de la Aurora que salía por las calles de El Palo, lugar donde se fueron a vivir mis abuelos a principio del siglo XX, llegó desde Alhaurin El Grande...!! ¿Fueron ellos Mulliores alhaurinos?
Lo que sí tengo claro es que la gastronomía, los platos típicos de Alhaurin, sus sopas, sus migas y gachas, el “pan cateto”, sus dulces como los mostachones o los Bollos de Aceite. aún continúa enraizada en mi familia.
Hoy les animo a preparar una ensalada, un “mojete de "Alhaurin el Grande” donde juega un papel fundamental las naranjas propias del Valle del Guadalhorce. Una ensalada que se acompañaba e incluso se mezclaba con “pescado frito” o asado, desmenuzado, generalmente del día anterior.
¿CÓMO LO HICE?
INGREDIENTES PARA DOS PERSONAS:
1 patata grande, una naranja grande (tipo navelate, washingtona de Málaga, del Valle del Guadalhorce), media cebolla pequeña, blanca dulce (tipo cebolleta), sal, una ramita de perejil, sal y aceite de oliva virgen extra.
LOS PASOS A SEGUIR:
Pelar las patatas, enjuagarlas y cortarlas en trozos pequeños. Ponerlas en un cazo con un poquito de sal y cocerlas hasta que pinchándolas estén tiernas, pero con cuidado de que no se deshagan.
Cortar la cebolleta en juliana. Pelar la naranja retirándole con cuidado no sólo la cáscara, sino también toda la parte blanca que va cogida a los cascos.
En un recipiente cortarla en trozos pequeños de forma que se pueda aprovechar todo el zumo que va soltando mientras se corta.
Una vez cocidas, escurrir bien las patatas con un colador e incorporarlas a un plato junto con los trozos de naranja y la cebolleta. Salar al gusto
En el cuenco donde se queda el zumo de la naranja, añadir un buen chorreón de aceite, remover bien y echarlo sobre la ensalada.
Picar el perejil y espolvorearlo sobre la ensaladilla. Mezclar todos los ingredientes y servir. Buen provecho…
Va por ti papá, siempre en mi corazón. (Foto de mi padre, cuando aún vivía en Alhaurin El Grande, principios de la década 1.940)
Buen fin de semana y recuerden siempre mi consejo:
Disfruten de Málaga, no lo duden, no lo piensen, conozca sus bellísimos pueblos blancos, sus Sierras (aún algunas con nieve), sus bosques, sus valles, sus playas. Disfruten de su Sol y de la mar…..de su historia, de su cultura, de sus Museos, de su maravillosa gastronomía. Visiten Alhaurin el Grande y el chico (Alhaurin de la Torre), conozcan Málaga, ése lugar que muchos llamamos “El Paraíso”
Fuente: este post proviene de Blog de Mi Cocina Carmen Rosa, donde puedes consultar el contenido original.
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