Para aportar un toque original, además de la panacotta y el coulis le he añadido una base de gelatina de fresa. El resultado espectacular, os lo recomiendo como culmen a una cena especial o simplemente si queréis daros un merecido homenaje.
Ingredientes
-Coulis de fresa (pinchar aquí para ver la receta)
-2 láminas de gelatina neutra
-200 ml de nata (crema de leche) para montar
-50 gr de azúcar
-1 cucharadita pequeña de esencia de vainilla
-200 ml de leche
-1 sobre de cuajada en polvo
En primer lugar, vamos a preparar la base del postre a base de gelatina de fresa, para ello hidratamos las hojas de gelatina en agua fría. Mientras, calentamos unas cucharadas (aproximadamente 8 cucharadas soperas) de coulis de fresa. Cuando tengamos hidratada la gelatina la escurrimos y la mezclamos cuidadosamente con el coulis de fresa caliente. Volcamos en las copas (o recipiente elegido) y dejamos reposar varias horas.
Para la panacotta calentamos la nata (crema de leche) con el azúcar y la esencia de vainilla. Mientras, deshacemos la cuajada en la leche fría. Cuando la nata (crema de leche) rompa a hervir mezclamos ambas preparaciones y volvemos a calentar hasta que hierva nuevamente. Repartimos sobre las copas con la gelatina de fresa que teníamos reservadas. Dejamos reposar hasta el momento de degustar.
Unos minutos antes de tomar nuestra panacotta de fresa servimos por encima varias cucharadas de coulis de fresa y coronamos con unas virutas de chocolate negro.
Un postre muy sencillo, con la única salvedad de que necesitaremos varias horas de reposo, incluso de un día para otro potenciará aún más su sabor.
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