Como me apasiona la vainilla y también la Panna Cotta, pensé que este postre no podía salir mal de ninguna manera y efectivamente te lo confirmo. Es digno de probar. Lo malo es que seguramente empieces con una ración y quieras continuar con otra e incluso con otra así que es más que probable que eches al traste tu operación bikini. Pero seamos sinceros, ¿que sería de un día sin postre?. Yo soy de las que cuando voy a un restaurante y leo la carta, empiezo primero leyendo la parte de los postres, porque para mi sin duda, es lo mejor de la comida.
Como ya habéis visto en otras recetas de Panna cotta, es un postre de lo más sencillo de hacer, además de rápido y que encima vamos a necesitar muy pocos ingredientes.
Me pasa además que siempre que hago una Panna cotta, empiezo a pensar en cuál será la siguiente que haré y sobre todo de qué sabor e ingredientes, porque si hay un postre que se puede hacer de mil maneras diferentes, ese es la Panna cotta.
INGREDIENTES:
Para la Panna cotta:
400 ml. de nata (crema de leche) líquida (35% M.G.)
100 gr. de azúcar
1 vaina de vainilla o 2 cucharaditas de extracto de vainilla
4 láminas de gelatina neutra
Para el caramelo:
150 gr. de azúcar
50 ml. de agua
ELABORACIÓN:
Hidratamos las láminas de gelatina en agua muy fría durante 10 minutos.
En un cazo ponemos a calentar la nata (crema de leche), la vaina de vainilla o las cucharaditas de extracto de vainilla y el azúcar y llevamos a ebullición sin parar de remover. Retiramos del fuego.
Preparamos el caramelo líquido poniendo en un cacito el azúcar junto con el agua y removemos para que se mezclen antes de ponerlo en el fuego. Llevamos a ebullición y verás como empieza a hacer burbujas. Enseguida empezará a tomar color, estate entonces muy atento ya que en este momento es muy fácil que se queme. Retira del fuego y ten en cuenta que seguirá tomando color durante algunos segundos más, aún cuando ya no esté en el fuego.
Escurrimos las láminas de gelatina y las añadimos a la mezcla anterior. Removemos hasta que se haya disuelto por completo y se haya integrado en la mezcla.
En el fondo de los moldes echamos el caramelo líquido y a continuación la Panna cotta.
Introducimos en la nevera durante cinco horas como mínimo.
ALGUNAS ACLARACIONES:
Si no quieres hacer el caramelo líquido, puedes comprarlo envasado y utilizarlo después para un montón de postres más.
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