Si, lo confieso, ¡Tengo sidrome de Diógenes! Desde que comencé con esto del blog he ido acumulando una cantidad ingente de tarros de cristal ¡Son tan monos! ¡Y tan versátiles!Lllevo ya mas de una treintena de estos botecitos y ha ido a peor, ya guardo hasta los botellines y cojo botes de casas de amigos y familiares¡Hay Dios!
En casa ya me han dado el ultimatum: O les doy uso o me toca mandarlos a reciclar, así que este año me he propuesto ir utilizándolos...
El primer paso ha sido al buscar la receta del blog de Isa Azucarglass, que es el asaltado de este mes. Debia encontrar recetas que se pudieran "enfrascar". Al final la receta que me ha inspirado ha la panna cotta con salsa de brevas y que yo he trasformado a mi gusto.
Como muchos ya sabreis la panna cotta es uno de los postres italianos, concretamente de la región del Piamonte, mas conocidos internacionalmente y literalmente sigunifica "nata (crema de leche) cocida". Su sabor es muy suave y por eso normalmente se suele aromatizar con especias y se acompaña con salsas o guarniciones ácidas como, por ejemplo, los frutos rojos o, como yo en esta ocasión, de un coulis de mango.
Ingredientes para 4 personas
Para la panna cotta
400 ml de nata (crema de leche) para postres
1 rama de vainilla
40g de azúcar
5 láminas de gelatina (Yo use las del Lidl)
Para el coulis de mango
300 gr de mango sin piel ni hueso puede ser fresco o en conserva.
50 gr de azúcar
50 ml de agua
2 Cucharadas soperas de zumo de limón
Como hacer panna cotta de vainilla con mango
1.- Empezaremos calentando la nata (crema de leche) en un cazo junto con el azúcar y la rama de vainilla abierta longitudinalmente y raspada el interior (Así se soltaran más facilmente las semillas que son lo que aporta el aroma) Debe calentarse pero no debe llegar a hervir. Apartamos del fuego
2.- Mientras calentamos la nata (crema de leche) ponemos las láminas de gelatina a hidratar en un bol lleno de agua fría Es importante añadirlas de una en una, de lo contrario se quedaran pegadas y no se hidrataran correctamente.
3.- Cuando estén hidratadas las escurrimos apretándolas con la mano y las añadimos a la nata (crema de leche) que ya tendremos fuera del fuego pero caliente. Removemos bien.
4.- Colamos la mezcla para eliminar los trozos de corteza de vainilla y si hay algún trocito de gelatina que no se haya disuelto.
5.- Repartimos la nata (crema de leche) en 4 tarros individuales (Si no tenéis tarros, también se puede hacer en moldes de flanes y luego desmoldar) Dejamos reposar hasta que templen y luego enfriamos en la nevera.
6- Mientras se enfrían las panna cottas preparamos el coulis de mango. Para ello ponemos todos los ingredientes en un cazo al fuego y dejamos cocer un par de minutos. Trituramos, colamos y enfriamos.
7.- Al momento del servicio cubrimos la panna cotta con un poco de coulis de mango y servimos el resto de coulis en una salsera para que la gente se sirva a su gusto. ¡Y a disfrutar!
¡Ya veréis como os encanta!
Por cierto, como ya os he comentado anteriormente, si o ha gustado la receta, me hacéis un gran favor compartiendo este post en vuestras redes sociales dándome así la oportunidad de llegar a más gente.
Muchísimas gracias de antemano y ¡Nos vemos en el próximo post!
Un abrazo