La espelta es considera como el origen de todas las variedades de trigo actuales, aunque no ha sido hasta esta última década cuando la popularidad ha crecido gracias al reconocimiento de sus múltiples cualidades nutricionales y a su uso en la gastronomía. Como podréis ver en las fotos la pasta es algo más oscura y tiene un sabor diferente, el único problema es que es tres o cuatro veces más cara que la pasta normal.
Ingredientes:
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- 2 dientes de ajo.
- Un cuarto de cebolla.
- Cuatro cucharadas de tomate frito casero.
- 200 mililitros de nata (crema de leche) para cocinar.
- 75 mililitros de vodka.
- 1 cucharadita de maicena.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal.
Elaboración:
Lo primero que hacemos es cocer la pasta en abundante agua hirviendo con un chorrito de aceite. Suele tardar lo mismo que la normal, unos diez minutos, aunque estar pendientes. Una vez cocida la pasta, se refresca y se pone en un escurridor.
Ahora vamos a comenzar a cocinar la salsa, echamos un poquito de aceite en una sartén y ponemos a pochar la cebolla que habremos cortado en pequeños trozos, luego añadimos el ajo y cuando todo haya cogido un color dorado, le añadimos el tomate frito. Le damos un par de vueltas para que se integren todos los ingredientes y salamos.
El siguiente paso es añadir a la salsa la nata (crema de leche) y el vodka, tened cuidado con la bebida, ya que si os pasáis le puede dar demasiado sabor al plato. Si os gusta la textura que tiene la salsa la podéis dejar así, pero si queréis que os quede un poco más espesa, disolvéis una cucharadita de maicena en un poco de agua y se la añadís a la salsa.
Una vez que la salsa ha adquirido la textura deseada, la podéis pasar por la batidora o dejarla como esta. Yo en este caso la he dejado así, porque me gusta saborear tanto la cebolla como el ajo. El siguiente paso es añadirle la pasta, le dais un par de vueltas y ya está lista para comer.
Tiempo de preparación: 20 minutos.
Gasto: 2 euros.
Raciones: 2 raciones.
Dificultad: Muy fácil.