Masa:
Huevos 1 unidad
Yemas 1 unidad
Harina leudante 400grs
Azúcar 200grs
Manteca 200grs
Esencia de vainilla 1cda
Sal c/n
Relleno:
dulce de durazno 1 frasco de 454 gr
Procedimiento
Para la masa: batir la manteca pomada con el azúcar hasta formar una crema (unos 4 minutos con batidora eléctrica). Agregar la esencia de vainilla (que puede reemplazarse por ralladura de limón o naranja), el huevo y la yema. Seguir batiendo hasta obtener una crema homogénea. Incorporar la harina leudante con la sal. Para esto, dejamos de lado la batidora eléctrica y la cambiamos por una espátula de goma o cuchara de madera. La idea es integrar los secos sin amasar, no trabajar demasiado la masa. Con movimientos lentos, como aplastando, vamos uniendo los secos a esta preparación. Podemos usar las manos hacia el final, pero sin abusar. Si le damos demasiado trabajo, la masa quedaría chiclosa, y no tierna como buscamos. Una vez que la masa está bien integrada, se envuelve con papel film y se lleva a la heladera por media hora aproximadamente. Este paso es muy importante, porque si la masa no tiene suficiente frío y descanso, no vamos a poder estirarla correctamente. Una vez que la masa se enfrió, la sacamos de la heladera y la rompemos un poco con las manos para volver a unirla. La dividimos en dos bollos: 2/3 de masa para forrar la base y el tercio restante queda para hacer las tiras. Enharinamos un poco la mesada y estiramos la base hasta que quede de unos 3 mm de espesor aproximadamente. La enrollamos sobre el mismo palote y la colocamos en el molde de tarta enmantecado. Con las yemas de los dedos, nos aseguramos de que la masa llegue bien a todos los bordes del molde. Cortamos el excedente de masa alrededor de los bordes, y si es necesario, remendamos algún hueco que pueda haber quedado! . Colocar el dulce de durazno sobre la masa cruda. Hay dos formas de hacer las tiras de la pasta frola: una fácil y “rústica” y otra más compleja y prolijísima. Elige tu propia aventura: Forma fácil y rústica: Tomar pedacitos del tercio de masa restante y hacer choricitos finos y largos. Acomodar sobre la masa formando el clásico enrejado. Forma compleja y prolijísima: Estirar la masa con un palote formando un rectángulo. Colocarla sobre una placa metálica enharinada y llevar al freezer por media hora aproximadamente. Pasado ese tiempo, sacar la masa del freezer y cortar las tiras con un cuchillo afilado. (Acomodar sobre la masa formando el clásico enrejado). Pincelar las tiras con un huevo batido para que queden doraditas. Cocinar en horno medio por 40 minutos aproximadamente. Los bordes deben estar doraditos! Dejar enfriar para poder cortarla prolija.