Es una receta vistosa y nada complicada, eso sí, un poco de paciencia en el montaje y para su presentación me inspiré en el libro "50 ways to do Pumpkin pie". Me pareció muy original presentarla en botes individuales. Vamos con ella.
INGREDIENTES PARA 8 BOTES APROXIMADAMENTE:
PARA LA CAPA CRUJIENTE DE GALLETAS: 1 taza y media de migas de galletas tipo digestive. 3 cucharadas de azúcar moreno. 1/2 cucharadita de canela. 1/2 cucharadita de sal. 25 grs. aprox. de mantequilla sin sal derretira y enfriada ligeramente. PARA LA CREMA DE VAINILLA: 500 ml. de nata (crema de leche). 1 1/2 cucharadas de azúcar glass. 2 cucharaditas de esencia de vainilla. PARA EL PURÉ DE CALABAZA Y MANDARINA: 750 grs. de calabaza. El zumo de 2 mandarinas. 1 cucharadita de canela. 1/4 de cucharadita de jengibre. 1/8 de cucharadita de clavo molido. 2 cucharadas de azúcar. PARA EL FLAN DE CALABAZA Y MANDARINA: 1 sobre de preparado para flan. 1/2 litro de leche. La mitad del puré anterior. PARA EL ACABADO: Virutitas de chocolate y migas de galletas tipo digestive. PREPARACIÓN: DEL CRUJIENTE DE GALLETAS: Comenzamos preparando el crujiente de galletas, para ello mezclamos las migas de galletas con el azúcar, la canela y la sal, y le vamos añadiendo la mantequilla y amasando con las manos hasta formar una especie de pasta. Procurad que no esté demasiado compacta, que queden un poco sueltas, para ello utilizad la cantidad de mantequilla que consideréis. Introducimos la mezcla en un molde tipo pirex y horneamos unos 5 minutos a 180º. Cuando termine el tiempo, removemos las migas de galletas y volvemos a hornear durante un par de minutos más o hasta que queden doradas y crujientes. Reservamos. (Para ser fieles al título y realmente no utilizar el horno en su elaboración, podéis hacer la base sin hornear, mezclando simplemente las galletas con el azúcar, canela, sal y mantequilla hasta formar una pasta como las que nos sirven de base en algunas tartas, como la de queso). DE LA CREMA DE VAINILLA: Batimos a punto de nieve fuerte la nata (crema de leche) bien fria y añadimos el azúcar glass y la vainilla y seguimos batiendo hasta que queden totalmente integrados. Reservamos. PARA EL PURÉ DE CALABAZA Y MANDARINA: En un recipiento apto para microondas introducimos todos los ingredientes del puré, tapamos y cocemos en el microondas a máxima potencia durante 10 minutos. Comprobamos que la calabaza esté tierna y si no es así, le damos unos minutos más, hasta que esté bien cocida. Trituramos con la batidora el puré y reservamos. PARA EL FLAN DE CALABAZA Y MANDARINA: El flan lo haremos en el último momento, justo antes de montar la tarta, para ello seguimos las instrucciones para elaborar el flan, añadiendo en el último momento la mitad del puré de calabaza y mandarina que hemos preparado con anterioridad, sin dejar de batir con las barillas para que se integre bien. MONTAJE: Con una manga pastelera con punta redonda grande vamos vertiendo la crema en el tarro desde fuera hacia adentro hasta formar una capa de un par de centímetros de altura. Golpeamos los botes sobre un paño de cocina para nivelar la capa de crema. Espolvoreamos por encima dos cucharadas de migas de galleta al horno que teniamos reservado, golpeando de nuevo ligeramente los botes para nivelar la capa de galleta. Con otra manga pastelera vertemos otra capa de puré de calabaza y mandarina y nivelamos nuevamente. Con cuidado, vertemos una capa del flan que teniamos preparado sobre el puré, dejando que éste cuaje. Una vez cuajado el flan, decoramos con el resto de crema de vainilla. Cambié la boquilla por una rizada y espolvoreé con virutas de chocolate y migas de galleta.