Si hace un tiempo me dicen que utilizar el calabacín como ingrediente para un pastel es de lo más normal y es propio de las tendencias fit, me hubiera costado creerlo. Tuve un poco esa sensación con el pastel de zanahoria y he de confesar que es de mis favoritos. Fue un misterio hasta que lo probé por primera vez y es que era ésa la misma duda que me recorría el pensamiento ante el uso de esta hortaliza.
He de decir que el papel que juega en esta receta es espectacular. Le da un toque jugoso y saludable que compensa con el aceite de oliva y la hacemos deliciosa añadiéndole cacao en polvo y una cobertura de chocolate con pistachos.
Las rebanadas son todo un manjar con el que podéis acompañar vuestros desayunos o meriendas. Si tenías dudas sobre si hacer esta receta espero ayudarte a disiparlas, porque es uno de los pasteles más jugosos que jamás he probado. Y además...os aseguro que si no decís nada, nadie se va a dar cuenta de cuál es el ingrediente secreto que hará la boca agua a quién lo pruebe.
¿Me acompañas a ver cómo se elabora? Encendemos el horno...
Ingredientes:
- 3 huevos
- 250 grs. azúcar
- 300 grs. calabacín
- 120 grs. leche
- 120 grs. aceite de oliva virgen extra D.O Sierra Mágina
- 250 grs. harina
- 50 grs. cacao en polvo
- 16 grs. levadura en polvo
- 1/2 cdta. sal
Para la cobertura:
- 150 grs. chocolate fondant
- 80 grs. nata (crema de leche) para postres
- 1 cdta. miel o golden syrup
* Pistachos para decorar.
Preparación: En primer lugar comenzamos pelando y troceando el calabacín en dados pequeños. Lo trituramos en nuestro procesador de alimentos o batidora. A continuación, agregamos los huevos y el azúcar y lo trituramos todo de nuevo.
Luego añadimos la leche y el aceite que iremos integrando al resto de ingredientes. Primero uno y después el otro.
Tamizamos la harina, junto a la levadura, el cacao y la sal que añadiremos a un bol. Luego iremos vertiendo la parte líquida que hemos obtenido del resto de ingredientes en hilo hasta que resulte una masa homogénea.
Llevamos a un molde rectagular o de estilo plum cake que engrasaremos bien previamente. Horneamos a 180 grados unos 40- 45 minutos. Haremos la prueba del palillo y sacamos el horno cuando salga limpio. Lo dejamos enfriar completamente en una rejilla.
Para la cobertura de chocolate, calentamos la nata (crema de leche) en el microondas hasta que hierva y vertemos sobre el chocolate troceado en otro recipiente. Removemos bien con ayuda de una espátula y cuando esté casi disuelto añadimos una cucharadita de miel o de golden sirup.
Dejamos secar unos minutos y agregamos los pistachos troceados. Esperamos hasta que se solidifique nuestra cobertura y conservamos en recipiente hermético por unos días. ¡Listo para la merienda!
* Esta receta es una versión modificada de la compartida por Cocinando entre Olivos.
¿Qué os ha parecido? ¿Os animáis a hornearlo el fin de semana? En mi caso, además de salir de dudas sobre su textura y sabor, lo di a probar a mi familia y amigos sin decir nada para ver su reacción... y he de decir que quedaron todos muy sorprendidos y para bien.
Así que te animo a que comiences este año de manera positiva, elaborando recetas nuevas, con toque saludable y chocolate....mucho chocolate!
Quiero agradecer desde aquí la buena acogida que tuvo mi sorteo en Instagram. He conocido a mucha gente nueva que se agrega a nuestra comunidad y espero poder compartir con vosotros nuevas sorpresas más adelante.
Nos vemos muy pronto con más recetas dulces. ¡Cuidáos mucho!
Un saludo muy dulce.
Maribel García
Fuente: este post proviene de Fresas con Chocolate, donde puedes consultar el contenido original.
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