Aprovechando que aun hay fresas en el mercado, he preparado esta tarta, que es todo un clásico por lo que se refiere a los ingredientes, que combinan a la perfección.
La receta es la de un bizcocho genovés que le hemos cortado en tiras y las hemos ido poniendo en forma de espiral, dando así una forma mas vistosa a nuestra tarta.
Espero que os guste!!!
Ingredientes:
Para el bizcocho:
4 huevos M
110 gr. de azúcar
10 gr. de azúcar vainillado
120 gr. de harina de repostería
Pizca de sal
Para la crema de mascarpone:
250 gr. de mascarpone
1 cdta. pasta o esencia de vainilla
150 gr. de nata (crema de leche) para montar (con un mínimo de 35% m.g.), muy fría
60 gr. de azúcar
Mermelada de fresa casera ( pinchar para ver receta)
Unas fresas troceadas
Para la decoración:
Fresas, arándanos, frambuesas...
Preparación:
Bizcocho:
Precalentamos el horno a 180ºC calor arriba y abajo.
Batimos los huevos junto con los azúcares hasta que la preparación triplique su volumen. Veréis que la mezcla, después de unos 10 minutos de batido (dependiendo de la potencia de la batidora), alcanza el punto cinta, es decir que al levantar las varillas la mezcla cae formando un dibujo de cinta sobre la superficie.
Incorporamos lentamente la harina tamizada y la pizca de sal, mezclamos con movimientos envolventes, para que no se nos baje la mezcla.
Vertemos en una bandeja de horno forrada con papel de hornear y lo extendemos bien con una espátula.
Horneamos durante 10 minutos.
Sacamos del horno y dejamos enfriar completamente sobre una rejilla.
Crema mascarpone:
En un bol ponemos el mascarpone con el azúcar y la vainilla, batimos hasta obtener una crema lisa y sin grumos.
Añadimos la nata (crema de leche) fría y continuamos batiendo hasta que la crema esté espesa.
Montaje:
Damos la vuelta al bizcocho y quitamos el papel de horno.
Cogiendo el lado más largo del bizcocho, cortamos tiras de unos 5 cm de ancho cada una.
Ponemos una capa de mermelada de fresas y extendemos bien por todo el bizcocho.
Cubrimos con una capa de crema de mascarpone, encima de la de mermelada, extendemos bien.
Por encima de la crema de mascarpone distribuimos unas fresas cortadas en trocitos.
Enrollamos la primera tira completamente como si fuera un caracol y la colocamos en el centro del plato que nos sirva de presentación. A continuación cogemos otra tira y la enrollamos completamente pegada de la anterior. Haremos lo mismo con cada tira hasta hasta terminar con todas. De este modo obtendremos una tarta en forma de espiral.
El resto de la crema de mascarpone la ponemos en una manga pastelera con boquilla. Decoramos al gusto y terminamos de decorar con fresas, frambuesas, arándanos...
Buenísima!!!
FUENTE: "loleta.es"