Hacía tiempo que quería publicar esta receta, y con el buen tiempo que parece que ya viene para quedarse resulta la época ideal para hacerlo.
La receta es de mi madre, aunque le he añadido un ligero sabor picante y algún toque mío. Ella hierve la merluza y añade langostinos en vez de gambas y sin cebolla, pero a mí el gusto que le deja esta me encanta.
Tiene una textura cremosa y un sabor suave y delicioso, además de ser una manera perfecta para que los más peques coman pescado sin verlo.
Espero que os guste, es una receta para prepararla el día antes y poder así disfrutar de un día de relax sabiendo que tienes la comida lista en la nevera.
INGREDIENTES
350gr de merluza limpia
200gr gambas peladas
6 palitos de surimi
50gr tiras de pimiento rojo asado
1 cebolla tierna grande
4 huevos
200ml nata (crema de leche) para montar
2 cayenas pequeñas
Vino Marsala o Jerez
2 cucharadas soperas Ketchup
ELABORACIÓN
Picamos la cebolla en trozos pequeños y la pochamos en una satén junto con las cayenas y aceite de oliva hasta que se ablande.
Añadimos el pescado y gambas cortado en trozos pequeños, y cocinamos junto a la cebolla hasta que todo esté cocido. Salpimentamos al gusto.
Ponemos a precalentar el horno a 200º calor arriba y abajo con una bandeja tipo pyrex dentro.
Con una batidora de vaso o bien de brazo batimos los huevos junto a los pimientos, la nata (crema de leche), un buen chorro de vino o jerez y las dos cucharadas de ketchup y el surimi. Añadimos una pizca de sal.
Sacamos las cayenas e incorporamos el pescado (ver notas).
Mezclamos todo.
Forramos un molde de cake con papel de plata. Ojo aquí no dejéis agujeros, tratar de cubrirlo bien.
Ponemos la mezcla en el molde y lo metemos en el horno, dentro de la fuente pyrex y echamos agua cliente hasta cubrir un par o tres de dedos. De esta manera se cocinará al baño maría.
Horneamos durante 45, o hasta que al pinchar en el centro el palillo salga limpio.
Sacamos del horno, retiramos el molde de la bandeja y dejamos enfriar a temperatura ambiente.
Tapamos con papel de plata y metemos en la nevera, dejamos enfriar un mínimo de 6 horas(yo siempre lo dejo de un día para otro).
Antes de servir, sacamos el pastel del molde con cuidado, pasando la punta de un cuchillo por todos los laterales. Volcamos encima de una fuente y retiramos el papel de plata.
Podemos servirlo con mayonesa, salsa rosa, cherries y canónigos. Con salsa tártara queda también muy rico.
NOTAS
Yo lo hago siempre con un batidos eléctrico de vaso como este, bate muy bien.
La textura del pastel va a gustos. A mí me gusta que se note ligeramente los trocitos de pescado, asi que cuando añado el pescado le doy un toque de batida pero sin que se deshaga del todo.
Si os gusta una textura fina podéis batirlo todo junto de una vez hasta que emulsione bien, y si os gustan los trozos completamente enteros hacer la primera batida y luego le incorporáis el pescado con una espátula
Respetar los tiempos de reposado y enfriado para un buen desmoldado.
Fuente: este post proviene de La rosquilla de la tía Laura, donde puedes consultar el contenido original.
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