Patatas Chips Campesinas Al Microondas
Hoy y desde Dublín, donde estaré unos días, os dejo una receta perfecta para disfrutar este fin de semana que ya está a la vuelta de la esquina.
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Antes de irme, no podía no compartiros una de estas recetas fáciles y riquísimas de las que tanto nos gustan y ¡espero que disfrutes tanto como yo!
Seguro que conoces muchas marcas de patatas fritas estilo campesinas y, creo que no me equivoco, si digo que a la mayoría nos vuelven locos por ese sabor tan sabroso gracias a las especias utilizadas.
¿El problema? Que una bolsa de estas maravillas terrenales suele superar las ¡500 calorías! Y no, no estamos hablando de calorías interesantes para el cuerpo, ya que el mayor aporte va a provenir de aceites refinados, sal, azúcar (sí sí, azúcar) e infinidad de ingredientes cuyo nombre parece un conjuro para invocar a los demonios realfooders.
Pero, que no cunda el pánico que, ya sabes, que intento versionar las cosas ricas y tunearlas para que puedas disfrutar de la comida de manera sana, natural y deliciosa.
Estas chips son ideales para un picoteo viendo una peli, para guardarte en una bolsita zip y tener a mano un snack saludable y riquísimo e, incluso, para dipear con una salsa como este hummus de mango (te advierto que la combinación es espectacular).
Sin embargo, eso no quita que de vez en cuando quieras comerte unas patatas de bolsa (que ya te veo haciendo una hoguera con todas las chuches que tienes por casa). Como ya he dicho muchas veces; la clave de una dieta consciente y un estilo de vida saludable consiste en encontrar el equilibrio entre comer alimentos saludables y lo menos procesados posibles y, de vez, en cuando, comer alguna guarrería de estas sin tener que fustigarnos o irnos directos al gimnasio a hacer penitencia.
Comer sano es más sencillo que encontrar ese balance a nivel psicológico, pero por ello, debemos trabajar en estos aspectos.
Y ya no me enrollo más, que sé que lo que quieres es poder disfrutar de estas chips que, de verdad, no tienen nada que envidiar a las de bolsa. Venga, a por ello: coge papel y boli y, ¡al lío!
Ingredientes (sale bastante cantidad):
4 patatas normalitas
1 cucharada sopera generosa de aceite de oliva virgen extra
2 cucharaditas de postre colmadas de sazonador de espaguetis (yo uso siempre de Mercadona porque me encanta la combinación de especias que trae)
2 cucharaditas de postre colmadas de pimentón dulce (puedes sustituir la mitad por picante)
2 cucharaditas de postre colmadas de ajo en polvo
2 cucharaditas de postre colmadas de cebolla en polvo
2 cucharaditas de postre colmadas de perejil
Sal y pimienta negra al gusto
Procedimiento:
Antes de empezar, he de confesar que yo soy como el monstruo de las galletas, pero en versión patata, por eso, cuando hago estas patatas, hago en cantidades muy generosas, ya que desaparecen. Pero, si no quieres tantas, puedes ajustar las cantidades en función de tus necesidades.
Las reinas indiscutibles de esta receta son, sin duda, las especias; ellas le van a dar a nuestras patatas el toque tan delicioso y van a hacer que sean una bomba de sabor.
Lo primero que vamos a hacer es lavar muy bien las patatas, para ello, puedes ayudarte de un cepillo de uñas y así poder retirar toda la suciedad de los sitios más complicados.
Cuando utilicemos patatas y queramos usar su piel, lo mejor es que tengamos a mano patatas nuevas, ya que su piel es mucho más lisita y fácil de limpiar. Si tienes una patata que lleva más tiempo y ya presenta algunas arrugas, también puedes utilizarla con la piel, pero tendrás que asegurarte de limpiarla bien a fondo para quitar toda la tierra que tengan en los pliegues.
Cuando tengas las patatas bien limpitas, las vamos a cortar finitas. No hace falta que las cortes súper finas, pero intenta que todas tengan más o menos el mismo grosor para que se cocinen por igual.
Otra opción es utilizar una mandolina, si dispones de ella, ya que esto nos va a asegurar unas láminas finas y de igual grosor. Pero si no tienes no pasa nada, yo las he cortado con el cuchillo y quedan estupendas y crujientes.
Una vez que tengas todas las patatas laminadas, las ponemos en un bol bastante hondo para poder mezclarlas con los demás ingredientes.
Agregamos el aceite y las especias y movemos todo bien para que las patatas se impregnen con el aceite y las especias.
En un plato planito y grande, ponemos las patatas extendidas, evitando que queden unas sobre otras, ya que, si no, no se cocinarán.
Metemos el plato en el microondas y cocinamos a máxima potencia durante 5 minutos.
Transcurridos los 5 minutos, damos la vuelta a las patatas y volvemos a introducir otros 2 minutos y medio.
Cuando pasen esos minutos, comprobamos que las patatas estén hechas. Al ser tipo chips de bolsa, tienen que quedar crujientes. Por eso, si ves que aún están muy blanditas, volvemos a ponerlas otros 2 minutos y medio y volvemos a comprobar y, así, hasta que estén crujientes.
Sabes que con el tema microondas, siempre digo que es mejor ir comprobando cada rato que no pasarnos de tiempo y que se nos queme o se nos estropee lo que estemos haciendo.
Como ves, es una receta súper sencilla, no requiere de horno (aunque también las podrías hacer en el horno) y los ingredientes que hemos usado son todos naturales, apenas tienen aceite, por lo que el aporte calórico va a ser muchísimo menor que las compradas y, al usar aceite de oliva virgen extra, esas calorías vienen en forma de ácidos grasos esenciales que, si no sabes lo que son, aquítienes un artículo en el que ya los expliqué detalladamente.
¡Anímate con estas patatas y cuéntame qué tal en los comentarios!
¡Qué aproveche!
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