En Asturias es muy típico el picadillo de cerdo. Se trata de una carne similar al relleno del chorizo que suele comerse con tortos de maíz. O con huevos fritos. O como más te apetezca, porque es delicioso. Como cada vez que voy a Asturias, traigo unos cuantos paquetes y como andaba falta de ideas para guisar unas patatas, preparé estas patatas con picadillo en la olla lenta.
Es una receta sencillísima, como todas las patatas guisadas. Y, es que, habiendo patatas, puedes preparar un plato rico en un momento. Y cuando hace frío apetece un buen plato de cuchara, ¿verdad? Además, las patatas guisadas tienen la ventaja de que suelen gustarle a casi todo el mundo.
Otros platos pueden ser más conflictivos (al menos en mi casa), pero unas patatas guisadas, siempre triunfan. Mi opción favorita siempre son las patatas a la importancia, pero es cierto que necesitan más tiempo para prepararlas, así que no las hago muy frecuentemente.
Ingredientes (para 4 personas):
Patatas: 800 gramos.
Picadillo de chorizo: 200 gramos.
Cebolla: una.
Aceite de oliva virgen extra.
Vino blanco.
Elaboración de las patatas con picadillo:
Pela las patatas, lávalas, sécalas y córtalas en trozos chascándolas. Pela la cebolla y pícala.En una cacerola, pon a calentar un poco de aceite de oliva y sofríe la cebolla a fuego lento hasta que esté transparente. Añade el picadillo y rehógalo brevemente, lo justo para que empiece a cambiar de color.
Echa las patatas y mezcla todo. Sube el fuego y añade un chorrito de vino blanco. Mantén la cacerola al fuego hasta que se evapore el alcohol.
Pasa todo a la olla lenta, cubre las patatas con agua y cocina durante 4 horas en temperatura alta. Puedes poner un poco de sal, pero no te pases porque el picadillo ya está salado. También puedes poner una hoja de laurel si te gusta su sabor.