Hoy vamos a preparar un plato que me encanta, filetes de pechuga de pollo en salsa de champiñones con nata (crema de leche), al que he añadido algunas cosillas.
Es muy fácil de preparar y sabe genial.
El secreto creo que es la cebolla, es uno de mis ingredientes favoritos en cualquier plato y por supuesto en este no podía faltar.
Tiempo de elaboración
45 min
Ingredientes
Filetes de pollo
Champiñones
Cebolla
Ajo
Queso cheddar (opcional)
Nata (crema de leche) de cocinar
Pimienta negra
Alcaparras (opcional)
En caso de que como yo no compres la pechuga de pollo ya fileteada (te ahorras un dinero y no taradas nada), lo primero será cortar los filetes.
Corta también una cebolla en trozos finitos, así casi se deshará.
En una sartén añade aceite de oliva y echa la cebolla para pocharla. Un poco de aceite para que sude y después de un par de minutos echa ajo picado, uno o dos dientes.
Deja a fuego lento durante 5-10 minutos la cebolla pochándose y revisando para que no se queme.
El otro día mi amigo fonso me preguntaba cómo lo hacía para que no se me quemara. Claro, él le echaba casi cero aceite, así mal vamos para conseguir que se haga la cebolla y que no la pongamos negra… La cebolla tiene que estar empapada en aceite y el fuego no puede estar muy fuerte ya que la cebolla necesita de su tiempo para hacerse.
Mientras se hace puedes aprovechar a cortar en láminas los champiñones previamente limpiados. También puedes comprarlos ya laminados, pero lo que decía antes, se tarda nada y eso que ahorras.
En este punto yo le añado algo de queso cheddar para potenciar el sabor, podrías echar otros quesos grasos también o prescindir de este paso.
Puedes echar algo de pimienta negra que le dará un regusto muy rico.
Para finalizar y de manera opcional, también puedes añadir unas alcaparras, le dará un contraste que al menos a mí me gusta bastante
Fuente: este post proviene de El Sabrosista, donde puedes consultar el contenido original.
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