Este verano hemos estado en Asturias, ahora comprendéis porque queremos ponernos a dieta, ¿no? Tras una semana de desenfreno gastronómico teníamos que ponerle remedio porque nos hemos gastado todo el dinero que podríamos destinar a ropa nueva más grande…
El caso es que un día preparando la comida me entró nostalgia de esta tierra que para nosotros es tan especial y me dieron ganas de comer cachopo, para quien no lo conozca se trata de dos filetes de ternera rellenos de jamón curado, queso, pimientos y champiñones (aunque a veces el relleno varía), empanados y fritos, una bomba calórica que está de muerte.
Pues esto ultra light se me ocurrió pensando en el cachopo, que me perdonen los asturianos por esta comparativa pero cuando estas cuidándote también tienes que comer con la imaginación sino desesperas y abandonas la dieta al segundo día.
INGREDIENTES - 2 personas
4-5 filetes de pechuga de pollo
1 pimiento rojo asado
Champiñones en láminas
Queso en lonchas light
Perejil
Sal
Aceite de oliva
Pimienta negra
PREPARACIÓN
Salpimentamos los filetes por ambos lados y los pasamos por la plancha, sin hacerlos mucho ya que los terminaremos en el horno y se quedarán secos.
En una sartén salteamos los champiñones en láminas, a los que previamente les habremos añadido un poco de sal. En cuanto se doren un poco y se oscurezcan los retiramos.
Montamos nuestro plato colocando encima de cada filete unos pocos champiñones, unas tiras de pimiento rojo asado y cubriendo con una loncha (o media) de queso. Espolvoreamos el perejil picado y metemos en el horno para que se funda el queso.
Está súper rico y quedan las pechugas de pollo más jugosas.
¡Feliz día!
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