Receta de pestiños con miel
Aunque mas tarde de lo que pensaba aquí os dejo éstos pestiños con miel, muy ligada a nuestra repostería mas tradicional, son muy típicos en Semana Santa al igual que las torrijas tradicionales de azúcar y canela o en Navidad sobre todo en Andalucia, de hecho mi familia paterna celebraba la cuaresma tanto con estos como con éstos otros pestiños azucarados. Actualmente la verdad es que los podemos encontrar durante todo el año y en prácticamente toda España, dependiendo de la zona con matices diferentes.
De la misma forma que las flores de carnaval o las rosquillas de anís los pestiños son una masa frita aromatizada con distintas especias, siendo las mas comunes el ajonjolí o la matalauva... siendo tan golosa como soy ¿quien puede resistirse a éste universo de sabores que tenemos la suerte de poder disfrutar, aunque sea en pequeñas dosis por aquello de poner freno a los kilos?
En ésta ocasión he preferido hacer una masa neutra, sin ningún aromatizante, que incluso la podríamos utilizar como masa de empanadillas, tan solo he añadido una piel de limón en el aceite de freir, para dar mas protagonismo a la miel.
INGREDIENTES:
250 g. Harina
250 g. Vino blanco
50 g. Manteca de cerdo
5 g. Sal
Aceite de oliva virgen extra para freir
500 g. Miel
250 g. Azúcar
150 ml. Agua ELABORACIÓN:
En un bol amplio ponemos los ingredientes de la masa, es decir la harina previamente tamizada, el vino blanco, la manteca de cerdo y la sal y amasamos todo hasta conseguir un conjunto homogéneo y una masa dura. Reposamos una hora.
Con un rodillo estiramos la masa lo mas fina posible, para que al pujar hacia arriba al freirlos, no queden crudos.
Cortamos la masa en rectángulos pequeños de unos cinco por tres centímetros y formamos los pestiños mojando con una gota de agua y uniendo los extremos presionando bien.
Calentamos abundante aceite de oliva virgen extra en una sartén honda y añadimos la piel de limón que retiraremos una vez dorada.
Cuando el aceite empiece a humear freímos los pestiños por tandas hasta que adquieran un color dorado por todos lados. Sacamos a un plato con papel absorbente. Así hasta terminar con la masa.
Preparamos el almíbar de miel poniendo un cazo la miel, el azúcar y el agua. Llevamos a ebullición.
Bañamos los pestiños en el almíbar de miel y sacamos inmediatamente sobre una rejilla para que escurra el excedente.
Presentamos en una bandeja, ya están listos para haceros disfrutar.
Fuente: este post proviene de Yerbabuena en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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