Puedes conservarlos en aceite, en almíbar, en agua, solo en vinagre, confitados, asados… Si seguimos, puedo acabar la semana que viene, y aún eligiendo la técnica o método que uses, seguirán habiendo muchas formas más de hacer tu conserva de pimientos, así que te ofrecemos una de las maneras más sencillas para que tengas unos pimientos para echar mano de ellos cuando te venga en gana, estos te durarán mínimo un par de meses si una vez abierto los guardas en frío.
Ojo, estos pimientos no son en aceite y son tan fáciles de hacer, que ni tendrás que pelar los pimientos. Pueden servir para acompañar tus platos de carne o pescado, para agregarlos a tus ensaladas, para montarte unas tostadas del carajo, sírvelas con unos huevos fritos y unas Patatas fritas, para todo tipo de sándwiches o hamburguesas, tienes mil y una opciones para usarlos, créeme, te durarán poco.
El truco de esta receta es equilibrar el punto de acidez con el del dulzor, y sí, deben quedar dulces, pero no tiene que parecer que son pimientos caramelizados o en almíbar, solo así es que podrás usarlo en más platos. Si quieres, puedes tatemar, soasar, o morronear los pimientos, es decir, quemarles la piel para pelarlos, pero no creo que sea necesario en esta receta, lo dejamos a tu elección, veamos pues como podemos hacer estos pimientos de una manera rápida y sencilla.
RECETA Nº 488 – PIMIENTOS EN CONSERVA
Raciones: 750 gramos
Dificultad: Baja
Preparación: 10 minutos
Tiempo de cocción: 25 minutos
Coste: Bajo
Tipo: Aperitivos Verduras, hortalizas y legumbres
Familia: Verduras
Sub Familia: Pimientos
Cocción: Olla
INGREDIENTES
1 pimiento rojo
1 pimiento verde
1 pimiento amarillo
3 dientes de ajos pelados
550 ml agua
550 ml vinagre de manzana
170 gr azúcar blanco
1 cc sal fina
PREPARACIÓN
1. Lo primero que debemos hacer, es quitar el corazón y semillas a los pimientos y los cortamos en tiras del grosor deseado. Reservamos.2. En una olla agregamos el agua, vinagre, sal y azúcar y ponemos a fuego medio-alto y removemos hasta que se disuelva todo, solo veamos líquido y empiece a hervir.
3. Es momento de añadir los pimientos y a fuego medio, pero hirviendo suavemente, los dejamos cocinar unos 25 minutos.
4. Apagamos el fuego, agregamos los dientes de ajo y esperamos a que enfríe del todo.
5. Traspasamos los pimientos a un envase hermético de cristal y cubrimos con todo el líquido que nos entre en el frasco, tapamos y guardamos al menos un par de horas hasta usar.
NOTAS
Si quieres unas variantes de sabor, te recomiendo añadir al mismo tiempo que los dientes de ajos, unas ramitas de tomillo fresco o romero, unas hojas de laurel o quizá unas ramitas de eneldo fresco, los granos de pimienta negra y mostaza siempre le van bien a estas preparaciones, pero si quieres el sabor lo más neutro posible, déjalo como en la receta.Fuente: este post proviene de Gastronoming, donde puedes consultar el contenido original.
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