Hoy es viernes... y me voy a dar el gustazo de cenar pizza. Pero no una pizza cualquiera de esas que se compran en el súper y nos solucionan la cena en 10 minutos.
Hoy voy a cenar pizza casera, desde principio a fin.
No penséis que es un trabajazo, porque no es así. En realidad es un gustazo probar una pizza hecha con nuestras manitas, con los ingredientes que más nos gustan, y lo mejor de todo, rica de verdad.
Así que, manos a la masa (y nunca mejor dicho), vamos a preparar nuestra pizza.
He vuelto a utilizar la masa de la Pizza "definitiva" de pavo y pimientos. Lo siento, pero de momento, y hasta que no consiga hartarme de ella, seguiré diciendo que es mi preferida. Así que para hacer la masa pinchad AQUÍ.
INGREDIENTES para el relleno:
- 2 ó 3 Filetes de pechuga de pollo.
- 1 Cebolla
- 4 Tomates
- 1 Ajo
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
- Queso en lonchas que sea fácil de fundir
- Aceitunas
- Orégano
Modo de preparación:
Picaremos bien la cebolla y la pocharemos en una sartén con aceite de oliva. Doraremos un ajo junto a la cebolla, y cuando veamos que empieza a dorarse lo retiraremos. Añadiremos el los filetes de pollo troceados y los saltearemos. Añadir pizca de sal.
Después reservaremos el pollo.
Por otro lado, lavaremos los tomates y los trocearemos. Los pondremos en el vaso de la batidora, junto con la cebolla pochada y lo trituraremos todo. Pondremos el tomate en la sartén, con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y lo cocinaremos a fuego medio hasta que la salsa de tomate esté lista. Sabremos que está lista porque se consume el agua y la salsa toma cuerpo.
En nuestra base de pizza, que ya tendremos pre-horneada (siguiendo las instrucciones para la masa del enlace anterior), pondremos una capa de tomate, el pollo por encima, las lonchas de queso y unas aceitunas. Espolvorearemos con un poco de orégano.
¡ Y al horno!
La pondremos a una temperatura de 200ºC aproximadamente, hasta que esté doradita por encima.