Las albóndigas las hice 3 días antes y las congelé una vez fritas. No sabía muy bien cómo iban a quedar y lo cierto es que el resultado fue bueno. Simplemente las horneé 15 minutos antes de servir, el tiempo de descongelarse en el horno. Así que recomiendo totalmente este plato para cualquier celebración donde tengas muchos comensales o muchas otras elaboraciones que preparar. Sin duda, la mejor opción es comerlas recién hechas, pero horneadas y con la salsa el resultado es más que aceptable. Salsa que por cierto está de rechupete.
Ingredientes para unas 20 albóndigas
500gr. merluza
1 puño de arroz redondo
1 huevo
1 diente de ajo
1 cucharada de perejil picado
sal, pimienta
Harina para rebozar
Aceite para freír
Lo primero que haremos es cocer el arroz en agua con sal durante unos 20 minutos. Una vez cocido, colamos, reservamos y dejamos enfriar.
Pelamos el ajo y lo picamos bien junto con el perejil. Reservamos.
Picamos la merluza. Podemos hacerlo a cuchillo o con una picadora (yo lo hice así). Recordemos de quitar previamente las espinas y piel que pueda haber.
En un bol colocamos la merluza triturada y añadimos el huevo batido, el arroz, la picada de ajo, la sal y la pimienta al gusto. Mezclamos bien y lo guardarnos en la nevera durante uno 30 minutos.
Una vez pasado el tiempo en la nevera la masa, haremos bolitas con las manos, dándole forma de albóndiga. Las pasamos por harina y las freímos en abundante aceite.
Ya podemos servirlas junto con una salsa o solas, o bien congelarlas si queremos utilizarlas otro día.
Ingredientes para la salsa de almendras
100gr. almendra cruda
300ml. nata (crema de leche) de cocina
1 diente de ajo
aceite de oliva, sal y pimienta
Lascas de queso parmesano para decorar (opcional)
En una sartén agregamos un dedo de aceite de oliva y freímos el ajo picado junto con las almendras. Doramos las almendras y retiramos.
Trituramos las almendras en una picadora. Las mezclamos con la nata (crema de leche) y batimos bien todo.
Colocamos la mezcla de la nata (crema de leche) y las almendras picadas en una cazuela y calentamos a fuego medio hasta que espese.
Retiramos y ya la tendremos lista para acompañar nuestras albóndigas.
Emplatamos con unas lascas de parmesano por encima si queremos y listo.