Que alegría de viernes!!, mira que se me ha hecho larga la semana.Yo creo que aún no me he recuperado de las navidades y cuando me dé cuenta tengo otra vez el carnaval encima. Y ahora que lo digo...tendré que ir pensando de que me voy a disfrazar este año.... quizás me disfrace de "arroz con leche", que este año con tanto turrón de chocolate me han salido muchos "granos".
Bueno, ya lo iré pensando que me voy a empezar a estresar!!.
Para celebrar que es viernes prepararemos algo dulce y encima de aprovechamiento. Os acordáis de las rosquillas de leche condensada del otro día?, pues con estas!. Es que escondí tanto la caja de las rosquillas para que los niños no las devoraran en un día que cuando me acordé donde las había metido se habían puesto un poquillo duras. Pero ya sabéis que por aquí no se tira nada.
Ingredientes:
Medio litro de leche.
Tres huevos "L".
Tres cucharadas de azúcar.
Tres cucharadas de leche condensada.
Unas cinco ó seis rosquillas enteras.
Caramelo líquido.
Preparación:
Batimos los huevo con la leche, añadimos la leche condensada y el azúcar y seguimos batiendo suavemente, para que no hagan espuma, hasta que disolvamos el azúcar. En un molde apto para el horno ponemos caramelo líquido en el fondo y añadimos el preparado y vamos sumergiendo las rosquillas enteras (sin desmenuzar)para que se empapen lo mejor posible con la leche. El corte con las rosquillas enteras queda muy bonito.Tapamos bien con papel de aluminio e introducimos en el horno precalentado, al baño maría a 180º hasta que esté bien cuajado.
Desmoldar una vez frío, mejor al día siguiente.
Buen provecho amigos!!.