Qué poco cuesta comer sano y diferente, y qué complicado se nos hace a veces, ¿verdad? Pues hoy os traigo una receta de las que no os vais a poder resistir en hacer y, os aseguro que pasará a ser una de vuestras recetas estrella con las que sorprender a vuestros invitados por dos razones: lo fácil que es de preparar y por su originalidad. Una manera diferente de presentar un aperitivo divertido.
Ingredientes:
Pechugas de pollo cortada en filetes
un vaso de caldo de verduras
láminas de pasta filo
1 cucharadita de harina
1 cucharadita de curry
sal y pimienta
aceite de oliva
Elaboración:
1.- Freír el pollo en una sartén con un poco de aceite de oliva. Añadir el caldo, una cucharadita de harina, una cucharadita de curry, sal y pimienta al gusto y dejarlo reducir (aproximadamente 10 minutos).
2.- Dejar enfriar, desmenuzar el pollo en hebras o trocitos muy pequeños en la picadora. Añadirle la salsa y mezclar bien.
3.- Estender una de las láminas de pasta filo y con un pincel pintarla de aceite, poner otra lámina encima y cortarlas en 4 rectángulos. Cada uno de esos rectángulos será un bastoncito. Rellenar con un poco de pollo y enrollar. Repetir hasta obtener todos los bastoncitos.
4.- Colocar los bastoncitos en el horno a 160ºC hasta adquirir un tono tostado.
Servir caliente y acompañado con salsa. Opciones que nos gustan: salsa agridulce, salsa de soja, y mi favorita, salsa barbacoa.
Una receta original, que gusta a todos y, lo mejor, que se prepara en un momentito! ¿Quién se anima a hacerla?