Hoy voy a proponerte una receta de crema muy sencilla, la crema bávara de vainilla que servirá para acompañar a tus frutas preferidas, aportando un toque de frescor, si la sirves recién sacada del refrigerador. Su origen es suizo y podría clasificarse entre las cremas y los mousses por su ligereza y buen sabor.
Primero, diluye 60 gramos de gelatina sin sabor en un poquito de agua (sigue las instrucciones de tu fabricante) cuando la tengas disuelta reserva. Después bate en un bol grande y hondo, 4 yemas de huevo con 100 gramos de azúcar, hasta que queden ligeramente blanquecinas y muy espumosas.
En una olla pequeña hierve 300 ml de leche y cuando rompa su hervor retírala del fuego, deja que se calme al menos 1-2 minutos y pónla de nuevo al fuego, pero al mínimo, a fuego bajo, sin que llegue de nuevo a hervir (muy importante) agrega entonces las yemas con el azúcar poquito a poco y bate de forma enérgica hasta que espese ligeramente, entonces retira del fuego y agrega la gelatina poquito a poco sin dejar de remover, añadiendo también unas gotitas de esencia de vainilla líquida. Pon en un molde previamente untado con mantequilla y deja que solidifique, sirviendo después con tus frutas preferidas.
Recetas de postres y dulces