Con esta receta participo en el Reto de Junio 2015 de Cocineros del Mundo. Espero que os guste. A mi me ha encantado hacer por primera vez esta antigua receta que pertenece a mis recuerdos de recetas de familia.
No os podéis imaginar lo delicioso que me ha quedado el plato, cuando lo terminé pensé que me podía venir genial como aperitivo ya que tenía invitados. En la casa de mis padres se hacía a menudo para días especiales o de invitados en mi casa, era uno de los aperitivos preferidos de mi padre, pero tengo que confesar que yo personalmente nunca lo había preparado. Al haber vivido en Perú unos años y al ser un país con una gran colonia japonesa, mis padres se aficionaron a la cocina peruana - japonesa, que es una combinación maravillosa y que buena cuenta y resultados ha dado en restaurantes de todo el Mundo con grandes cocineros y también muy innovadora convirtiéndose en una de las grandes cocinas fusión internacional.
Bueno que no me enrollo más. Tenía todos los ingredientes en casa, así es que me puse a ello y en menos de 15 minutos los tenía preparados y emplatados. Espero que os guste la pinta, pero lo que no os puedo ofrecer es un trocito para que lo probéis, es una maravilla.
Se funde todo en uno y resulta un bocadito fresco y original. Podría acompañar perfectamente una carne al horno o a la plancha o como primer plato también una elección estupenda.
No deja de ser un plato digamos atrevido, ya que no a todo el mundo le gusta el pepino o le sienta mal, o simplemente no lo ha probado lo suficiente. Pues os lo presento. Aquí está tan rico y sencillo.
Este pequeño sobre que aparece en la foto es la sal de Té Sakura, la uso cuando se presenta la ocasión y esta era una de ellas. Yo feliz, pues es una maravilla. La propia flor se come y es extraordinaria, observad en la imagen inferior, es esa pequeña flor rosa.
Bueno empiezo a contaros como lo he preparado. Más fácil no lo hay. El único problema es cortar bien el pepino en una lámina grande y enrollar. Hace falta un buen cuchillo grande y afilado. Recordad que los cuchillos que no cortan son más peligrosos que los que lo hacen de una forma limpia y segura.
Se pela y se corta con un cuchillo grande y afilado primero por la mitad y luego se "pela" como si fuese una manzana, es decir tiene que salir una capa fina de esta primera mitad del pepino, hasta convertirse en una lámina, que rellenaremos posteriormente. Hacemos lo mismo con las otras mitades.
El relleno se pone solo en la primera parte de la lámina de pepino, en esta fotografía inferior se ve lo que puse de relleno. Primero el aguacate en dos gajos finos, luego el queso, el bacalao ahumado y por último las cebolletas cortadas finas.
Se enrolla apretando un poco y se corta en rodajas no demasiados finas. En la imagen inferior a la derecha podéis observar como se ha quedado el centro del pepino con todas las semillas. Este pepino se guarda para hacer una ensalada o una sopa fría de pepino, parecida a la vichyssoise y acompañada con unas gambas pequeñas fritas, por ejemplo.
2 Pepinos gruesos (salen 4 rollos completos, ya que se cortan por la mitad)
Relleno
Dos finos gajos de Aguacate por cada lámina de pepino
Queso fresco de untar tipo Philadelfia
Cebolleta fresca cortada muy fina
Bacalao ahumado
Limón (solo unas gotas para el aguacate y el bacalao
Pues ya está, ahora solo emplatarlo para que nos quede muy presentable y apetitoso. Es bastante fácil para lo resultón que es. Espero que os guste y que lo hagáis para que me mandéis las fotos y pueda ver las maravilloso que os quedan estos rollitos tan majos.
¡Hasta la próxima!