Nunca había hecho rosquillas, y he preparado éstas que tenía apuntadas del blog Con sabor a canela, he seguido la receta tal como lo explica Merchi en su blog y me han quedado riquísimas. La única diferencia es que yo he tenido que agregar algo más de los cuatrocientos gramos de harina que indica, supongo que dependerá del tipo de harina, la masa pedía un poco más, pero eso es cuestión de ver como va quedando. Necesitamos:
400 gr. de harina
50 gr. de mantequilla
100 gr. de azúcar
2 cucharaditas de levadura royal
3 huevos
60 mls. de anís
ralladura de naranja ( yo puse de naranja y de limón)
1 pizca de sal
aceite de oliva
azúcar
canela
y también si os gusta con azúcar moreno y canela para rebozar
En un bol mezclamos los huevos con el azúcar, anís, ralladura de naranja (o limón), y la mantequilla en punto pomada, batimos muy bien.
En otro bol tamizamos la harina con la levadura y la vamos agregando a la mezcla anterior poco a poco, hasta obtener una masa que se despegue de las manos, aunque a mi me quedó un poco "pegajosa", pero no quise agregar mucha harina más para que no quedaran duras. Tapamos la masa con film transparente y lo dejamos en la nevera media hora. Después ponemos aceite a calentar y a mi me gusta echarle una piel de limón al aceite, vamos friendo las rosquillas, las ponemos en un plato con papel absorbente. Aparte ponemos en un plato azúcar con canela molida y vamos pasando las rosquillas. Una vez enfriadas las he guardado en un taper y aguantan tiernas, y están buenissssimas.