Me encantan los picos de pan.
Son como las pipas, empiezo cogiendo uno y acabo con el paquete en un momento.
Crujientes, con un poco de embutido o mojando en algún paté, son deliciosos.
Me fijé en esta receta de Mavi, en su blog Mandarinas y Miel porque me recordaron a unos picos que se hacen en un pueblo de Málaga, Ardales, donde yo trabajé unos años. Allí hay una fábrica de picos artesanales, de esos que no hay dos iguales. Eso es parte de su encanto, se hacen a mano y son distintos unos de otros.
Estas rosquilletas valencianas que nos enseña Mavi, tienen una bonita historia. Os invito a pasar por el blog para enteraros de los detalles de la historia y de paso ver sus riquísimas recetas.
Mavi es otra de las compañeras elegidas para asaltar su cocina en este mes de julio en el que me pasaré de "ladronzuela". Es mi quinto asalto. Ya sabéis que Marga del blog Azafranes y Canelas nos ha metido en este lío y nosotros le hacemos caso con mucho gusto jajajaja.
El único cambio que he realizado en la receta,es la cantidad de levadura.Yo he reducido la cantidad de levadura porque tiendo a usar menos cada vez, pero todo lo demás es igual a la receta original.
INGREDIENTES: Para unas 35 o 40 rosquilletas
120 ml de agua tibia
100 ml de aceite de oliva
400 gr de harina de trigo
2 cucharaditas de sal
15 gr de levadura fresca o 5 gr de levadura seca
escamas de sal para adornar
PREPARACIÓN:
Ponemos el agua tibia en un recipiente y desmenuzamos la levadura. mezclamos bien.
Añadimos el aceite
Y la sal y mezclamos bien con una cuchara o tenedor.
Agregamos la harina y comenzamos mezclando hasta que no tengamos más remedio que sacar la masa a la encimera y amasar a mano.
Hacemos una bola, dejamos reposar en un recipiente hasta que crezca la masa.
Una vez crecida la masa, cogemos porciones y damos forma de palillos amasando entre las manos. Dejamos que reposen una horita, en la bandeja de horno. Horneamos 12 o 15 minutos a 180º con calor arriba y abajo. Justo antes de meter en el horno, yo las pincelé con aceite y espolvoreé escamas de sal.
¡Que ricas! No vas a dejar ni una!
¡Empiezas y no paras!