En verano siempre leo como mínimo tres libros y otros a medias con Monsieur Accidents. Os hablaré de todos, pero hoy nos centraremos en "Se prohíbe mantener afectos desmedidos en a puerta de la pensión" de Mamen Sánchez, libro que he elegido para la receta para una historia de este mes.
Tenía muchas ganas de leer este libro, ya me había leído "La felicidad es un té contigo" y me encantó. La forma que tiene de escribir Mamen Sánchez, mezclando géneros como la novela de intriga, el romanticismo, la comedia de costumbre... hace que sus libros resulten fáciles de leer, con personajes muy peculiares y con un característico sentido del humor.
Me parece interesante que cada capítulo de la novela sea una norma que hay que cumplir en la pensión y las diferentes referencias que hace la escritora en relación a la literatura, como Corín Tellado, Rosamunde Pilcher, "Las sombras de Grey", Jane Eyre, Josephine March, Agatha Christie, Miss Marple, Hércules Poirot, Sherlock Homes, Virginia Woolf, Mujercitas...
Y ahora vamos con los ingredientes para preparar una natural y colorida receta de limonada en la que el misterio, el amor y la risa hagan que el verano sea más refrescante:
1 abogada de 45 años que se separa tras 12 años de matrimonio (Opcional: Cecilia Dueñas)
1 casa a orillas del Manzanares (Opcional: La pensión más bonita del mundo)
2 abuelos (Opcional: Miguel y Teresa Quintana)
1 constructor con heridas tanto externas como internas (Opcional: Andrés Leal)
1 okupa nacido en Kenia (Opcional: Justice)
1 joven futura escritora de novelas románticas (Opcional: Noelia Villanueva de Campos)
1 anuncio en el ABC de hace 4 años
1 asistenta (Opcional: Azucena)
2 medallitas de oro del ángel de la guarda
1 tesoro escondido en una cavidad entre los ladrillos en uno de los tabiques
1 Agatha Christie del siglo XXI (Opcional: Catalina Carrión de los Condes)
1 becaria rusa (Opcional: Ivana)
1 taza de normas
Echamos 1/2 litro de agua en una tetera blanca de flores rojas y mango azul y llevamos a ebullición. Cuando el agua esté hirviendo, le agregamos una abogada de 45 años, 12 años de matrimonio, ningún hijo, una amante y un divorcio y dejamos infusionar durante 15 minutos a fuego medio-bajo. Transcurrido este tiempo, apartamos del fuego y le añadimos una casa a orillas del Manzanares y dos abuelos fallecidos y dejamos reposar durante 10 minutos. Seguidamente, colamos y vertemos el líquido en una botella. Exprimimos el zumo de un limón, así como el de las 35 normas, y lo agregamos. Por último, añadimos el resto de los ingredientes y metemos la botella en el frigorífico para que se enfríe.
La servimos en unos vasos con pajitas moradas, unos cubitos de hielo, una corteza de limón y una ramita de lavanda.
¿Cuál es tu historia? Ya sabes que tienes un mes para macerar la idea, preparar una refrescante limonada e invitarnos a probarla. A principios de octubre recibirás las críticas gastronómicas correspondientes.
Bon appétit!
Fuente: este post proviene de Pequeños Accidentes, donde puedes consultar el contenido original.
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