Esta tarta es ideal como postre o para merendar con un buen café, a vuestra familia o amigos les encantará.
Espero que os animéis a probarla y os guste tanto como a mí!
(Para un molde redondo desmontable de 24 cm)
Ingredientes para la masa quebrada:
230 grs. de harina de trigo.
100 grs. de mantequilla sin sal (cortada en dados).
60 grs. de azúcar glas.
1 yema de huevo L.
50 ml. de nata (crema de leche) para montar o crema para batir (35% M.G).
Una pizca de sal.
Ingredientes para el relleno:
500 grs. de queso mascarpone.
6 Cdas. soperas de miel suave.
7 higos grandes (cortados por la mitad).
Preparación de la masa quebrada:
En un bol amplio echamos la harina tamizada, el azúcar, la pizca de sal y la mantequilla en dados, mezclamos con los dedos hasta obtener una textura de migas de pan.
Mezclamos la yema de huevo con la nata (crema de leche) y añadimos a la mezcla, mezclamos hasta conseguir una masa lisa y homogénea, envolvemos en papel transparente (film) y metemos en la nevera 20 minutos.
Sobre la encimera enharinada estiramos la masa con un rodillo de cocina hasta obtener un círculo de 5 milímetros de grosor, (el círculo tiene que ser más grande que el molde).
Engrasamos el molde con spray desmoldante o aceite de girasol y colocamos la masa sobre él, ajustandola bien a la base y los laterales, con cuidado porque se puede romper, recortamos la masa sobrante y metemos en el congelador 20 minutos.
Pasado el tiempo, sacamos el molde del congelador y pinchamos la base con un tenedor, arrugamos un papel de hornear y cubrimos la base, los laterales y los bordes, ponemos encima peso para que la base no se deforme y se mantenga plana, (garbanzos, abichuelas o bolitas de cerámica especial para hornear).
Metemos en el horno precalentado a 180° grados, 20 minutos.
Pasado el tiempo, sacamos del horno y le quitamos el peso y el papel de hornear, llevamos de nuevo al horno con la misma temperatura, 18 minutos.
Sacamos del horno y dejamos reposar sobre una rejilla mientras hacemos el relleno.
Preparación del relleno:
Echamos en un cazo el queso junto con la miel, ponemos a fuego medio y sin dejar de remover dejamos hasta que se disuelvan y se integren (no tiene que hervir).
Vertemos en el molde sobre la base de masa quebrada y colocamos encima los higos cortados por la mitad con el lado cortado hacia arriba.
Metemos en el horno precalentado a 160° grados, 30 minutos o hasta que se dore.
Sacamos del horno y dejamos sobre una rejilla enfriar por completo.
Pasado el tiempo, tapamos y metemos en la nevera hasta el día siguiente.
Al día siguiente desmoldamos y ya la tendremos lista para servirla y disfrutarla.