Esta vez es una receta de un blog que me tiene conquistada (este) y que a pesar de que utiliza algunos ingredientes difíciles de encontrar a veces, siempre hay alguna forma de sustituirlo y quedan riquísimas las recetas. Y, aunque casi siempre cambio más de un ingrediente o no lo utilizo, de las recetas (porque lo hago con lo que tengo por casa ese día) no quedan naaada mal.
Además, como os comentaba en el post anterior (este) estamos intentando mejorar nuestros hábitos alimenticios usando productos lo más naturales posibles. Con las recetas que hay en ese blog saco nuevas ideas o ingredientes en los que no había pensado y me sirve un poquito de inspiración. Lo único "malo" es que es un blog de una chica británica por lo que sus post son todos en inglés, pero con muy poco nivel de inglés yo creo que se pueden sacar las ideas principales de las recetas.
Bueno...pues no me lío más con historias y os voy a contar como preparar la tarta que tan buena pinta tiene, ¿no creéis?
Es ligera, pero bastante calórica (a tener en cuenta para los que estáis siguiendo algún tipo de dieta en concreto) ya que lleva leche de coco (información nutricional) y frutos secos (avellanas y almendras) todo es natural pero con un alto contenido en grasas saturadas. Y pese a lo que se dice de las grasas saturadas, no todas son malas (en su justa medida, como todo) y para que lo comprobéis aquí os dejo un artículo que me ha resultado interesante para comprender mejor que las grasas son indispensables para nuestras salud.
Bueno...y después de todo este rollo "técnico" (cosas de ser bióloga...que una no se conforma con leer cualquier cosa jajaja) os voy a enseñar como preparar esta rica tarta!
Ingredientes
La medida de taza hace referencia a un recipiente de 250ml
Base
1 taza de copos de avena
3 cucharadas de aceite de coco
3/4 taza de avellanas tostadas
3/4 taza de dátiles
Relleno
2 tazas de almendras crudas
1 mango maduro
Es importante que sea un mango dulce, de buena calidad y que esté en su punto óptimo de maduración, ya que es lo que va a dar el sabor a la tarta. La variedad KENT es una de las más apreciadas para este tipo de recetas.
4 cucharadas de aceite de coco
1/2 taza de leche de coco
1/2taza de leche (yo utilicé desnatada pero podéis echar cualquier leche vegetal)
Elaboración
Base
Triturar las avellanas junto con la avena hasta hacer "harina" practicamente
Añadir el aceite de coco y los dátiles deshuesados
Cubrir la base de un molde (desmoldable) de papel de hornear y echar la mezcla. Presionar la mezcla para que quede uniforme la base
Congelar mientras preparamos el rellenoRelleno
Batir primero las almendras hasta conseguir una textura muy fina.
Añadir el resto de ingredientes y batir
Verter en el molde, decorar al gusto y dejar reposar en la nevera durante una noche
Y ya tenemos nuestra tarta lista para comer!
Es ideal para preparar con antelación y solo tener que servirla en el momento.
Podéis presentarla como más os guste...con fruta, frutos secos...Pero en este caso me he decantado por grosellas y chocolate para darle un toque un poquito diferente.
¿Qué os parece el resultado?
Es una tarta dulce, de textura cremosa y muy suave. A pesar de se calórica no es nada empalagosa, por lo que es ideal para estos meses de calor.
Si la probáis, ¡¡ me encantaría saber que tal os ha salido!!
Un besito
Nos leemos pronto!