Para todo hay una primera vez, y sí, ésta fue mi primera vez. Nunca había usado una manga pastelera, ni para chocolate ni para nada. Y yo, que soy más chulo que nadie no os penséis que me informé no, qué va, yo a palo seco. No pregunté a nadie, y así quedó. Y sin embargo que conste que aprender aprendo, porque sobró un pequeño cuenco de cobertura que puse en la nevera y que al día siguiente quise utilizar y fíjate tú por dónde, pude adornar perfectamente. Pues nada, "Felicisdeidasdf 45" cariño! y vosotros que lo sepáis, ¡¡¡se adorna en frío!!!
Pero de verdad que no quiero quedarme con lo que no me gustó de la tarta sacher, sino con los ¡ummm! de mi familia cada vez que daban un bocado. En sí la tarta estaba exquisita, la cobertura perfecta, y aunque no es fácil de hacer (al menos para mi) no digo que no la vuelva a hacer si me lo piden mis hijos o mi mujer otra vez (qué no haría yo por ellos).
Tengo que agradecer de nuevo la receta al canal DeUvasAPeras de Youtube. Esta chica es fantástica, hace unas cositas "deliciosas".
Ingredientes
Para el bizcocho
6 huevos separados yemas de claras
130 gr de chocolate para fundir
130 gr de mantequilla
130 gr de harina
200 gr de azúcar
14 gr de levadura en polvo tipo Royal
Un chorrito de esencia de vainilla
Una pizca de sal
Para el relleno y la cobertura
450 gr de mermelada de albaricoque (yo utilicé fresa, pero la auténtica lleva albaricoque)
250 gr de azúcar
120 ml de agua
300 gr de chocolate para fundir
80 gr de mantequilla
Debo decir que yo incrementé un 25% estas cantidades, y al final me sobró un poco. Así que las cantidades están bien proporcionadas.
Elaboración
Vamos con el bizcocho...
Derretimos al baño maría el chocolate. Una vez está derretido, añadimos la mantequilla y removemos hasta fundirla. Ya con el calor residual, incorporaremos las yemas de huevo batiendo rápidamente para que no se cuajen. Añadimos el chorrito de esencia de vainilla y reservamos la mezcla.
Montamos las claras con el azúcar con ayuda de unas varillas eléctricas, de manera que la mezcla quede espumosa pero no merengue.
Mezclamos la harina, la levadura y la sal y tamizamos. Seguido, enmantequillamos el molde. Aclaro que mi molde redondo es de 26 cm de diámetro y quedó un poquito baja, así que si lo podéis hacer con uno algo más pequeño mejor que mejor.
Añadimos ahora la mezcla de las claras al chocolate con ayuda de unas varillas manuales, haciendo movimientos suaves, envolventes y de arriba a abajo, para evitar que el chocolate se nos vaya abajo.
Iremos ahora incorporando poco a poco la harina mezclada, con las varillas manuales o espátula; se hace poco a poco y con paciencia para que quede una mezcla homogénea y sin grumos.
Precalentaremos el horno a 180 grados. Llevamos la mezcla al molde y al horno unos 50 minutos, hasta que un pincho quede seco.
Ahora lo cortamos por la mitad para dividir el bizcocho en dos. ¿Cómo? Pues con un cuchillo largo o como hice yo; marqué un poquito el corte con un cuchillo y pasé alrededor un hilo normal de coser. Luego cruzas las 2 puntas y solo hay que estirar... quedó perfecto. Separaremos las 2 capas.
Cogemos el aro ajustable del molde y ponemos abajo la mitad de arriba del bizcocho (la parte superior de la mitad de abajo es más bonita, más recta, y quedará mejor arriba de la tarta).
Ponemos una capa generosa de mermelada, y nos reservaremos 2 ó 3 cucharadas. Ahora con cuidado pondremos la otra capa encima y apretaremos un poquito para que la mermelada se esparza bien. No debería salirse por los lados ya que sujeta el aro del molde.
Ahora con la mermelada que nos queda y un poquito de agua lo pondremos al microondas unos segundos y batiremos bien, haciendo una especie de almíbar, y bañaremos bien todo el bizcocho de arriba. Así quedará borrachito, más jugoso (doy fe que se nota el almíbar en la tarta y es espectacular).
Vamos ahora con la cobertura...
En un cazo ponemos el agua con el azúcar y calentamos. Cuando esté bien disuelto, añadiremos el chocolate, cuidando de derretirlo sin que hierva en ningún momento.
Ahora apagamos el fuego y añadimos la mantequilla en trozos pequeños, de manera que se vaya derritiendo con el calor residual.
Desmoldaremos la tarta y la ponemos en alto, pero con una bandeja debajo para recoger la cobertura que vaya cayendo. Con decisión, verter toda la cobertura al centro de la tarta, de manera que se esparza homogéneamente por toda la tarta. Con el chocolate sobrante decoraremos, pero por favor, esperad a que esté frío!!!!
Esta tarta está ¡deliciosa!