Hoy celebro mi 50º cumpleaños (solo me cuesta un poquito escribirlo, que conste) y me he hecho este regalo en forma de tartita individual de Selva Negra, he elaborado 4 tartitas, uno por cada miembro de mi familia, mi mujer Sol y mis hijos Santiago y Ana.
La verdad sea dicha, me siento estupendamente con mis 50 tacos, es mi edad sí, pero me siento mucho más juvenil y con ganas de vivir que nunca, y de seguir cocinando y ver disfrutar a los demás con las recetas que preparo, unas veces con mejor acierto que otras, pero siempre poniendo en ellas todo mi empeño.
Quiero compartir con todos vosotros un pedacito de esta fabolosa tarta y que brindemos juntos porque estemos muchísimos años disfrutando de todo lo bueno que la vida nos pone por delante.
La Schwarzwälder Kirschtorte es conocida en castellano como Tarta Selva Negra. Se trata de uno de los postres más conocidos de la cocina de Baden y uno de los más preciados en la cocina alemana.
Para conocer el origen de esta tarta nos vamos al siglo XVI, cuando el chocolate ya estaba asentado en toda Europa y sobre todo en una zona de Alemania llamada Foresta Negra,en alemán Der Shwarzwald, situada en el estado de Baden-Württemberg.
El nombre evoca la oscuridad y el misterio de esta región, conocida por sus cerezas ligeramente agrias con las que se elbora un aguardiente de cerezas e incoloro llamado Kirsh.
Es una tarta recubierta con virutas de chocolate sobre la parte superior y adornada con cerezas. Las capas interiores están hechas con bizcochuelo (la original de cacao) emborrachados con kirsch y entre las capas tiene un relleno de nata (crema de leche) y mermelada, que en mi caso la he puesto de cerezas.
Las guindas que he usado, son guindas que he tenido maceradas en anís seco durante 2 años y que por fin las he podido usar:El resultado, y no lo digo yo solamente, espectacular, con un sabor muy particular y ácido, gracias al chocolate negro y sobre todo, a las guindas de aguardiente.
Para la versión infantil: reservar el almíbar antes de añadir el kirsch y usar guindas confitadas.
Ingredientes:
Para el bizcocho genovés:
Podeís usar perfectamente un molde de bizcocho ya elaborado y este tiempo que os ahorraís.
280 gr. de huevo
95 gr. de azúcar
120 gr. de harina floja
Para el almíbar de kirsch:
150 gr. de azúcar
200 gr. de agua
25 gr. de kirsch
Para la chantilly:
250 gr. de nata (crema de leche)
45 gr. de azúcar glas
Para la decoración:
300 gr. de chocolate negro (70-80 % de cacao) en virutas
Un poco de azúcar glass
Un par de guindas en aguardiente
Elaboración:
1ª Parte: elaborar el bizcocho:
Batimos los huevos con el azúcar y calentamos la mezcla al baño maría o al microondas hasta alcanzar los 50ºC.
Vertemos el contenido en la batidora o amasadora y batimos hasta esponjar y conseguir una textura densa y de color blanquecino.
Con ayuda de una espumadera, añadimos la harina previamente tamizada sobre los huevos, mezclando delicadamente todos los ingredientes.
Rellenamos los moldes elegidos (de 10 cm de diámetro), previamente forrados con papel sulfurizado, y horneamos a 180ºC durante 14 minutos.
Sugerencia: Sí quereís ser más puristas, podeís elaborar el bizcocho genovés de cacao.En este caso añadir 15 gr de cacao en polvo a la harina y tamizar el conjunto sobre os huevos batidos.
2º Paso:Elaboración del almíbar de kirchs:
Mientras tanto, preparamos el almíbar, calentando el agua con el azúcar hasta que se disuelva y añadiendo a continuación el kirsch.
3er paso:Elaboración de la chantilly:
Por otra parte, hacemos la chantilly. Montamos la nata (crema de leche), que debe estar (al igual que las varillas y el envase, bien fría) y, a los dos minutos, añadimos el azúcar glas. Seguimos batiendo hasta que espese.
4º paso:Elaboración de las virutas de chocolate:
Finalmente preparamos unas deliciosas virutas decorativas con el chocolate negro.
Partimos de la base de tener un chocolate derretido.Vertemos el contenido sobre la encimera bien limpia, y con ayuda de una espátula ancha, vamos braseando el chocolate para enfriarlo.Estiramos y dejamos a un espesor de 1 mm, hasta que enfríe y cristalice del todo.
Con ayuda de un cuchillo, cortamos tiras transversales de 5 cm de ancho.Ayúndanos de un triángulo, vamos formando las virutas.
Ya tenemos preparados todos los ingredientes.
Montaje de la tarta:
Cuando el bizcocho esté listo, lo cortamos en 3 partes iguales.Empezamos emborrachando la base de la tarta con el almíbar de kirsch.Sobre ella ponemos una capa de mermelada de cerezas.Encima ponemos otra base de bizcocho, empapándolo igualmente de almíbar y sobre ésta una capa de crema chantilly, a la cúal incrustamos unas guindas en aguardiente.
Tapamos con la última capa de bizcocho, emborrachamos y cubrimos la parte superior y laterales con el chantilly.
Alisamos bien con una espátula el chantilly, cubrimos con las virutas de chocolate y espolvoreamos con un poco de azúcar glas.Adornar con un par de guindas y disfrutarla.