Los ingredientes que vamos a necesitar son:
Para asar los tomates:
600 g de tomates cherry
aceite de oliva virgen extra
sal
pimienta
Para la tarta:
200 g de queso de cabra
4 cucharadas de mostaza a la antigua
1 cucharadita de albahaca
1 masa brisa
Nosotros vamos a asar 300 gramos de tomates cherry tipo pera y 300 gramos de tomates cherry redondos.
La masa brisa se puede sustituir por masa de hojaldre.
Preparación:
Elegimos el molde, nosotros vamos a elegir uno donde podamos hacerlo todo. El nuestro es uno de cerámica de 26 cm de diámetro.
Precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.
Lavamos y secamos bien los tomates. Los colocamos en una fuente de horno. Como tenemos dos tipos de tomates, colocamos los tomates tipo pera en el exterior y en los redondos a continuación. Si nos sobra algunos tomatitos tipo pera, los ponemos en el centro. A continuación, rociamos con el aceite y salpimentamos.
Metemos en el horno a una altura media-alta y horneamos durante 30 minutos.
Transcurrido este tiempo, los sacamos del horno y los dejamos enfriar un poco. Añadimos por encima el queso de cabra desmenuzado. Agregamos unas cucharadas de mostaza distribuidas uniformemente y espolvoreamos la albahaca.
A continuación, colocamos la masa encima, doblando los bordes dentro del molde y empujando un poco la masa para que se amolde bien. Picamos o hacemos unos cortes en la masa una vez colocada. Llevamos al horno y horneamos durante 30 minutos a una altura media baja.
Sacar del horno y dejar reposar sobre una rejilla durante 5 minutos.
Presentación:
Transcurrido este tiempo, la volcaremos sobre un plato grande o base de tarta.
Y ahora, a disfrutar de esta tarta en buena compañía.
Bon appétit!
Fuente: este post proviene de Pequeños Accidentes, donde puedes consultar el contenido original.
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