La tempura es un rebozado que se hace con harina y agua muy fría. Existen muchas variaciones. Se suele hacer con harina de maíz aunque también queda bien con casi todo tipo de harinas y además hay quien le añade huevo a la mezcla.
Yo la hago con harina de garbanzo aunque le añado un poquito de harina de maíz porque me gustar más como queda el rebozado.
En esta ocasión he utilizado unos calçots finos, pimientos, zanahorias y calabacín pero queda muy buena con cualquier tipo de verduras y hasta incluso con pescado.
Para el método Montignac cambiar la harina de maiz por otra que sea apta, así como no incluir la zahahoria en esta receta por incrementarse su indice glucemico al cocinarla.
Si queréis darle más sabor a la masa se puede añadir un poco de granulado de caldo o para darle un color más doradito como si llevara huevo, se le puede poner una pizca de colorante o azafrán.
Como veis en la foto, las verduras las he cortado muy finas para que se hagan enseguida.
Ingredientes:
Verduras cortadas en tiras o lonchas finas
Harina ( yo en esta receta le he puesto 2 cucharadas colmadas de harina de garbanzo por una de maíz rasa)
Agua muy fría (la que necesite)
Aceite de oliva para freír
Sal
Elaboración:
Sazonar las verduras una vez cortadas.
Mezclar la o las harinas que hayais elegido en un bol con una pizca de sal y añadir el agua muy fría poco a poco sin dejar de remover hasta obtener una mezcla un poco espesa pero no demasiado, lo justo para que se adhiera una capa muy fina en las verduras antes de freírlas en una sartén con abundante aceite de oliva.
Se hacen enseguida, pero es mejor darle el punto dorado para que queden crujientes.
Una vez fritas, se extienden sobre un papel de cocina absorbente para quitarles el exceso de aceite.