Este es un postre que en mi casa se ha comido toda la vida, recuerdo que mi madre hacía tocino de cielo todas las semanas y es que mi padre trabajaba en una bodega, allí usaban las claras para clarificar el vino y las yemas sobrantes las repartían entre sus trabajadores.
A consecuencia de esto las monjas de un convento de Jerez próximo a una bodega y que también se beneficiaban de estas yemas sobrantes elaboraron por primera vez esta receta, y supongo que el nombre se debe a su textura y al lugar donde nació porque mas celestial que un convento...
Ya se que la mayoría de los que me leen conocerán esta receta y que está en infinidad de blogs, pero comprenderán que siendo de Jerez esto no podía faltar en mi recetario. Además tuve muchas yemas sobrantes de unos cuantos de macaróns que hice para una boda y tenía que darles utilidad...
Ahí va la receta.
Ingredientes:
12 yemas.
2 huevos enteros.
450 grs de azúcar.
250 de agua.
Para el caramelo líquido:
100 grs de azúcar.
5 o 6 cucharadas de agua.
Elaboración del caramelo:
Preparamos el caramelo echando en un cazo el azúcar y la seis cucharadas de agua, ponemos a calentar y cuando empiece a cambiar de color apartamos y movemos bien para que todo se disuelva. Volvemos a poner al fuego y cuando se empiece a dorar apartamos y lo echamos en el molde que vayamos a utilizar. Podemos utilizar caramelo liquido del que se compra.
Elaboración del tocino de cielo:
En un bol resistente al calor ponemos las yemas con los dos huevos, batimos con un batidor de mano y reservamos. En un cazo ponemos a hervir el agua con el azúcar durante doce minutos, apartamos y echamos sobre las yemas de manera que caiga como un hilito y batiendo enérgicamente pero siempre con un batidor de varillas de mano. Esta mezcla la pasamos por un colador o chino y la echamos en el molde caramelizado.
Tapamos y sellamos bien con papel de aluminio y ponemos al baño María, yo lo hice en la olla exprés durante 20 minutos, pero si hacéis menos cantidad reducimos el tiempo a 12 minutos. Si lo hacemos en el horno lo tendremos unos 40 minutos y pincharemos para ver si está hecho. Siempre dejamos enfriar y desmoldamos. Espero que os guste.
Fuente: este post proviene de mi taller de cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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