En esta misma entrada también os explicó como hacer una tortilla de bacalao, que es uno de los platos estrella de las sidrerías vascas y con ella voy a participar en el Concurso de recetas de Bacalao de Lazy Blog, patrocinado por Genuinus..
Lo primero que voy a hacer es contaros cómo se elabora esta rica receta, que es el primer plato del menú. La verdad es que es muy sencilla y acompañada con una buena sidra esta riquísima.
Ingredientes:
- 2 huevos.
-
- Media cebolla.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Perejil.
Elaboración:
Lo primero que debéis hacer con anterioridad a preparar el plato es desalar el bacalao colocándolo en un cuenco con agua fría durante 48 horas y cambiarle cuatro veces el agua. En vez de agua hay gente que la última vez le echa leche para que se blanquee y quede más jugoso.
Una vez que tenéis el bacalao desalado debéis quitarle las raspas y la piel y cortarlo en trozos pequeños. El siguiente paso es echar aceite de oliva virgen en la sartén y comenzar a pochar la cebolla o cebolleta, hay gente que le añade pimiento, pero en la mayoría de sidrerías en las que he estado no lo echaban.
Una vez que la cebolla está transparente, se añade el bacalao y lo pochamos junto con la cebolla. Una vez que está todo bien pochado lo sacamos a un plato y batimos los huevos, los echamos en la sartén y cuando están un poco cuajados, añadimos la mezcla y un poco de perejil, le damos varias vueltas a la tortilla hasta que esté cuajada, y ya está lista para comer. Como podéis ver en la foto la tortilla es alargada y no redonda, pero en la sidrerías la presentan así, lo que pasa es que mucho más goda porque suele ser para más comensales, en este caso es para un comensal.
SIDRERÍA VASCA
La tortilla de bacalao es sólo uno de los manjares que se puede degustar en una sidrería vasca y os confieso que hacerla en casa no tiene el mismo sabor que degustarla entre cupelas. Como ya os he mencionado este año estuvimos en el pueblo donde más sidrerías hay de todo Euskadi, Astigarraga.
En realidad nuestra afición por las sidrerías comenzó aquí en la sidrería Gartziategi y nueve años después hemos decidido volver. Había cosas que habían cambiado, pero la esencia continúa siendo la misma, cenar o comer de pie el menú compuesto por tortilla de bacalao, bacalao con pimientos, chuletón y de postre queso con membrillo. Todo ello regado con toda la sidrería que te puedas beber, ya que este establecimiento cuenta con numerosas cupelas y puedes probar la mayoría, algunas están abiertas al público y en otras te tienes que esperar a que las abra alguien del establecimiento. Todo ello al precio de casi 30 euros, así que si no conocéis todavía lo que es una sidrería vasca, os recomiendo encarecidamente este establecimiento.