Este plato es un clásico de la gastronomía vasca actual. La mía es una versión adaptada de esta tortilla, ya que no le pongo perejil y me gusta bastante cuajada, pero podéis hacerla a vuestro gusto.
Cuando compro bacalao seco, una vez desalado lo congelo, así que me aseguro de tener siempre a mano cuando me apetece un plato en el último momento. Pero también podemos comprar bacalao que ya viene desalado, es muy útil cuando no nos hemos acordado de poner el bacalao a desalar con antelación.
INGREDIENTES (para 4 personas):
Bacalao seco: 400 gramos.
Huevos: 8.
Aceite de oliva virgen extra.
Valores nutricionales (por ración):
Kilocalorías: 239.
Hidratos de carbono: 1 gramo.
Grasas: 15 gramos.
Proteínas: 24 gramos.
Precio (por ración): 1,54.
ELABORACIÓN:
Desalamosel bacalao metiéndolo en agua durante 24 horas o más (según el grosor de la pieza). El pescado lo dejaremos en la nevera durante el proceso de desalado e iremos cambiando el agua cada 8-10 horas aproximadamente.
Una vez desalado, lo secamos con papel de cocina y lo troceamos. Calentamos aceite de oliva en una sartén y salteamos el bacalao hasta que esté dorado.
Mientras el bacalao se dora batimos los huevos en un bol. Una vez que el bacalao está listo lo añadimos al bol de los huevos y mezclamos.
Añadimos un poco más de aceite a la sartén, si es necesario, y cuajamosla tortilla a nuestro gusto.