Cuando empecé a preparar esta fritada de bacalao no tenía muy claro si me iba a gustar o no. Me senté a la mesa un poco escéptica y mirando de reojo mi plato, pero mi desconfianza desapareció en cuanto me llevé el tenedor a la boca.
Para preparar esta fritada utilicé bacalao ya desalado, así que si tú lo compras salado tendrás que tener en cuenta el tiempo de desalado. Ya he comentado en otras recetas que el bacalao desalado me parece una idea fantástica. Antes tenía que estar pendiente de acordarme de desalarlo y eso no me permitía improvisar. Además del miedo de no desalarlo correctamente y echar a perder el plato.
INGREDIENTES (para 4 personas):
Bacalao desalado: 800 gramos.
Patatas medianas: 4.
Pimiento rojo: 1/2.
Calabacín: uno.
Aceite de oliva virgen extra.
ELABORACIÓN de la fritada de bacalao:
Pela las patatas y córtalas como si fueses a hacer tortilla de patata. Retira la piel del bacalao y córtalo en dados. Lava el pimiento, sécalo y córtalo en tiras. Lava el calabacín, si vas a cocinarlo con piel o pélalo. Córtalo en tiras finas.En una sartén grande pon a freír las patatas hasta que estén hechas. Mientras se hacen, en otra sartén, calienta un poco de aceite de oliva y sofríe el pimiento hasta que esté tierno. En ese momento, tapa la sartén y deja que se cocine durante 5 minutos al fuego mínimo.
Echa el calabacín a la sartén y mezcla todo. Vuelve a taparla y deja que se cocine durante otros 5 minutos. Destapa la sartén y sube el fuego para que se evapore el agua del calabacín. Si es necesario, puedes añadir un poco más de aceite.
Una vez que se haya evaporado, baja el fuego, añade el bacalao a la sartén y mezcla todo. Cocina durante 5 minutos. Si el bacalao suelta agua, sube el fuego para que se evapore y deja que el contenido de la sartén se dore un poco.
Cuando las patatas estén listas, añádelas a la sartén y mezcla todo antes de servirlo. Corrige el punto de sal si es necesario.