Ya he puesto alguna que otra tortilla en el blog, pero no podía faltar esta... la "tipical spanish". Y es que en casa no se hace tortilla de patata? Con cebolla o sin, jardinera, como la hace mi suegra cuando le añade ajos y perejil, más cruda o más hecha, y la más chic, la del gran Ferrán Adrià, con patatas chips. Esta es la mía. Bueno, no. Esta es la de mi marido. Yo soy una negada para hacer tortillas, de sabor quedan buenas pero de aspecto... y con una así de grande peor, que nunca he tenido fuerza en las muñecas y soy incapaz de darle la vuelta. Así que yo pelo las patatas, corto la cebolla, y de todo lo demás se encarga mi costillo.
Ingredientes:
Patatas, tendréis que calcular que cantidad necesitáis. Nosotros somos 3 y le pongo unas tres patatas medianas.
1 cebolla no muy grande
Huevos. Dependerá de la cantidad de patatas que le hayáis echado.
Aceite
Sal
Preparación:
Pelamos las patatas y las cortamos muy finas, poco más que si fueran para hacerlas chips. Las ponemos con abundante aceite a freír, pero a una temperatura que no permita que se doren.
Mientras se van haciendo las patatas, pelamos la cebolla y la cortamos en juliana. Cuando queden unos pocos minutos para que la patata esté hecha, añadimos la cebolla a la sartén para que se poche.
Batimos los huevos y los salamos.
Retiramos las patatas del fuego, las escurrimos del aceite y las añadimos al huevo, removiendo para que con el calor de las patatas no se cuaje el huevo.
Echamos la mezcla en una sartén con poco aceite y hacemos la tortilla como cualquier otra.
Notas:
Si veis que hace falta huevo, pero no tanto como uno, o no tenéis más, podéis sustituirlo por un chorrito de leche.
Esta vez probamos a echarle un poco de levadura. La verdad es que no se apreciaba nada, pero suelen decir que quedan más esponjosas.