INGREDIENTES
8 huevos
3 kg de patatas (sin pelar)
1 cebolla
sal marina (al gusto)
120 ml de AOVE
ELABORACIÓN
Se pelan las patatas, se enjuagan y se cortan. Aquí priva el gusto o el tiempo que tengáis, se pueden partir de muchas maneras. A cuadraditos, redondas a cuchillo o como yo la he hecho ésta vez, cortadas a gajos con la mano: se hace una pequeña hendidura en la patata y se arranca con la mano, dicen que así se conserva mejor el almidón, yo no sé si es cierto pero cuando tengo tiempo la hago así, lo mismo es verdad.
Se dejan escurrir en un colador mientras se corta la cebolla.
Yo lo hice a pequeños trozos cuadraditos, se echan junto a las patatas y se programa la GM.
Se vuelca el AOVE en la cubeta y se programa: menú Freír 12´130º con la tapadera abierta.
Cuando veamos que el aceite ya chisporrotea le añadimos las patatas con la cebolla que habrán sido sazonadas al gusto, no pasarse porque si quedan sosas después se puede arreglar, de la otra forma no.
Se dan varias vueltas a las patatas junto a la cebolla y cuando veamos que están tomando todo el aceite a partes iguales cerramos la olla poniendo válvula cerrada con la misma programación. Seguramente habrá restado poco tiempo así que se le deja el mismo.
Terminado el programa se despresuriza y se abre la olla.
Yo separo las claras de las yemas y las dejo un poco menos que a punto de nieve. Echo las yemas y sigo batiendo hasta amalgamar todo.
Se sacan las patatas con cebolla, una vez probadas de punto y sal, y rectifico en la mezcla de huevos si le falta, no en las patatas porque ya tienen y se vuelcan en el bol.
Lo dejo tapado con un trapo o papel film durante unos minutos para que las patatas absorban los huevos.
No pongo más aceite en la cubeta porque tiene de sobra con el que puse para freír.
Programa olla: menú Horno: 9´120º válvula cerrada.
Probad con un pincho en medio de la tortilla si está cruda o hecha y si es así se le pone el cabezal de horno para dorarla por encima y así no tener que darle la vuelta.
Se deja enfriar unos minutos.
Con cuidado de no quemarnos se saca la cubeta de la olla.
Se pone un plato encima y se agarra la cubeta por los dos lados, yo utilizo un guante de cocina que une las dos manos, para no quemarme por si la tortilla se cae para algún lado.
Se vuelca y ya tenemos la cena lista.
Otro día la haré con otros ingredientes.
¡Buen provecho!