Tronco de Navidad o Bûche de Noël
Con la Navidad a la vuelta de la esquina, hoy traigo un dulce clásico en estas fechas, este tronco de navidad o como dicen los franceses, un bûche de Noël. Dado los tiempos que vivimos, he querido preparar un tronco alegre y colorido, especialmente pensado en sorprender a los niños de la casa y aunque en la mía ya están un poco creciditos, me he decantado por una decoración rosa hecha con chocolate ruby y bastones de caramelo.El bûche de Noël, es un postre tradicional oriundo de Francia que se prepara durante las navidades, muy popular en países de centroeuropeos. Básicamente consiste en un bizcocho genovés, en este caso de chocolate, relleno de algún tipo de crema y decorado con chocolate imitando la corteza de un árbol.
Según las creencias, el bûche de Noël se remonta a la tradición quemar en el hogar un tronco de madera o leño grande durante tres días en la época de Navidad para celebrar el solsticio de invierno y la llegada de la luz con el comienzo de un nuevo año, así como alejar la oscuridad.
Con el paso del tiempo y el uso de estufas en lugar de chimeneas, en el siglo XI, se transformó la tradición y se sustituyo el tronco de madera, por un postre que de alguna manera lo simulara.
Espero que os haya gustado los orígenes de este tronco de navidad o bûche de Noël, si os apetece otras recetas ligadas a estas fechas en otros países, aqui os dejo los enlaces del archiconocido christmas pudding inglés o éste Kulich un pan dulce ruso que se toma tanto en navidad como en pascua.
INGREDIENTES
Para el bizcocho genovés4 Huevos L
100 g. Azúcar
100 g. Harina repostería
20 g. Cacao puro
1 Pizca de sal
Relleno
500g. Nata (crema de leche) 35% grasa
75 g. Azúcar
200 g. Chocolate fondant
Decoración
200 g. Chocolate ruby
Azúcar glas
ELABORACIÓN
El día anterior preparamos el relleno y la decoración, para ello ponemos la nata (crema de leche) y el azúcar a calentar, mientras troceamos el chocolate y ponemos en un cuenco. Cuando la nata (crema de leche) empiece a hervir, apartamos del fuego y volcamos sobre el chocolate troceado. Dejamos reposar un par de minutos y removemos hasta conseguir una crema brillante y sin grumos. Tapamos con papel film y guardamos en la nevera hasta el día siguiente.
Para la elaboración del decorado, ponemos en el microondas el chocolate ruby y derretimos a potencia máxima en tandas de 30 segundos, removiendo el chocolate entre una. Una vez derretido, volcamos sobre un papel de hornear y con una espátula repartimos sobre toda la superficie hasta obtener una capa fina. Colocamos otro papel de hornear por encima, enrollamos y conservamos en la nevera.
Al día siguiente, ponemos la crema de chocolate bien fría y batimos con unas varillas eléctricas hasta conseguir una crema bien montada y aireada. Reservamos en la nevera.
Para preparar el bizcocho ponemos los huevos y el azúcar en un bol y con unas varillas eléctricas o un robot, montamos hasta que la mezcla blanquee y triplique su volumen.
Mezclamos la harina con el cacao y la sal, y tamizamos sobre la mezcla de los huevos. Removemos el conjunto con movimientos suaves y envolventes hasta integrar todo.
Volcamos sobre una bandeja de horno cubierta con papel sulfurizado y extendemos por toda la superficie. Horneamos a 180º durante 8 o 10 minutos en horno previamente precalentado.
Una vez horneado, sacamos y colocamos sobre un paño de algodón y enrollamos. Dejamos enfriar en el paño.
Una vez frío, rellenamos con la trufa y enrollamos, reservando tres o cuatro cucharadas. Dejamos un para de horas en la nevera para que se asiente bien el tronco, incluso podemos congelarlo para poder manipularlo mejor.
Sacamos del frio, y extendemos la trufa reservada por todo el tronco. Cogemos el chocolate ruby y con cuidado desenrollamos y colocamos los trozos que van rompiendo de forma armoniosa a lo largo del tronco. Por último, espolvoreamos con azúcar glas.
Desde aquí no me queda mas que desearos unas muy Felices Navidades y que sigamos unidos todos y disfrutando de los nuestros. ¡Un abrazo grande!