Con nevadas históricas en nuestro país, apetecen platos calentitos y muy completos como este, nada complicados pero bien ricos.
He utilizado unas albóndigas de carnicería, que las hay muy buenas y acorta considerablemente el tiempo de elaboración, pero si tenéis caseras mejor que mejor.
-medio kilo de albóndigas
-medio kilo de menestra congelada
-medio kilo de patatas
-6 cucharadas de AOVE
-1 cebolla
-1 cucharada de tomate frito casero
-1 hoja de laurel
-1 cucharadita de cúrcuma
-sal
En una cazuela amplia antiadherente, sofreímos las albóndigas hasta dorarlas. Sacamos a un bol y reservamos.
Picamos la cebolla y la añadimos a la cazuela sofreímos 10 minutos removiendo de vez en cuando.
Incorporamos la menestra y dejamos que se fría hasta que esté descongelada. Añadimos el tomate, reducimos unos minutos y agregamos las patatas peladas y cortadas en trozos. Volvemos a meter las albóndigas y removemos.
Echamos agua o caldo, lo justo para cubrirlo todo o un poco menos.
Incorporamos la hoja de laurel, la cúrcuma y la sal y llevamos a ebullición. Bajamos el fuego y dejamos que se haga tapado durante 20-25 minutos, comprobando que la patata está tierna.