Este guiso es un clásico no sólo en mi cocina si no en muchas otras cocinas, aunque pienso que cada cual le dará su toque especial. A mí este guiso me lo enseñó mi madre, que para esto de las salsas tiene un toque especial ¿No sé si será la práctica o que? Pero las borda.
Para los que estén empezando en la cocina este guiso tiene un poco de elaboración, pero estoy segura que si seguís el paso a paso os saldrá un guiso muy rico.
Las patatas son opcionales, pero en el caso que no las queráis echar el sofrito lo tendréis que hacer diferente, para eso os invito a que me visitéis en la receta de ¨El guiso de la abuela¨ la salsa tendrá que ser esa, y de paso veis otro guiso diferente y riquísimo.
Como preparar las albóndigas:
Poner la carne picada en un bol, echar los huevos, un ajo muy picado o ajo el polvo, la rebanada de pan de molde mojada en la leche, sal, pimienta negra y perejil a gusto.
Envolver bien hasta que esté bien ligado todo.
Dejar reposar tapado en la nevera 30 minutos mínimo.
Mientras tanto preparar los champiñones al ajillo.
Sacar la carne de la nevera y formar las albóndigas.
Echar en una sartén abundante aceite de oliva virgen extra.
Cuando esté caliente freir las albóndigas hasta que estén bien doradas y reservar.
Sofrito:
Cortar la cebolla y dos ajos a trocitos pequeños.
Quitar la mayoría del aceite de freir las albóndigas dejando como cuatro o cinco cucharadas.
Echar la cebolla y los ajos partidos y dejar dorar a fuego lento.
Añadir el vino, dejar evaporar el alcohol unos segundos.
Echar el agua, las albóndigas, los espárragos cortados a trozos y los champiñones.
Dejar que empiece a cocer a fuego fuerte, bajar el fuego al minimo y dejar cocer una hora.
Cortar las patatas a cuadritos y freir en abundante aceite.
Echar las patatas justo después de terminar la cocción del guiso.
Dejar reposar media hora antes de servir.
Consejos:
Echar las patatas al guiso es opcional, se pueden freir y echar en el momento de servir.
Si no se va a servir el guiso después de reposar, es preferible echar las patatas cuando se vuelva a calentar el guiso para servirlo, ya que si se echan las patatas con mucho tiempo de antelación podrían absorber toda la salsa.
Si veis que al hacer las albóndigas la mezcla ha quedado demasiado blanda y no las podéis hacer bien, echar un poco de pan rallado y envolver bien.
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