Son pocos los dulces típicos de Navidad que me quedan por publicar en el blog, ya que desde que comencé el blog, allá por el año 2010, he publicado los principales. En esta ocasión un dulce que no me gusta mucho el comercial, pero que en su versión casera está exquisito, por lo menos para mi, y que se ha convertido en otra opción más para preparar y engalanar mi bandeja de postres navideños.
He tuneado un poco la receta de mi amiga Ana que publicó allá por 2008, aunque también podéis ver de ella una versión un poco más elaborada y que el año pasado tuve el gusto de probar y que también está genial. Independientemente de que uséis esta primera versión o la siguiente, seguro que los alfajores os van a entusiasmar, incluso si no sois muy fan de este dulce.
INGREDIENTES:
250 gr. de almendra pelada (Ana le pone más almendra, el doble, pero en casa los niños no son muy fan de la almendra y me tengo que contener).
250 gr. de azúcar glass
100 gr. de harina
Un poco de agua
Para el almíbar:
100 gr. de agua
100 gr. de azúcar blanquilla
Más azúcar glass para rebozar
PREPARACIÓN:
Lo primero que haremos será tostar las almendras, yo las he tostado en la sartén. También tostamos en otra sartén o en el horno la harina hasta que cambie de color. Trituramos las almendras (por comodidad podeís usar almendra molida y tostarla a la vez que la harina, aunque a mi me gustan más las almendras enteras y luego trituradas).
Mezclamos las almendras ya trituradas con el azúcar glass y con la harina tostada. Añadimos un poquito de agua para integrar la mezcla y darle forma a los alfajores. Lo hacemos con las manos. Reservamos. Mientras, vamos preparando el almíbar, para ello ponemos en un cazo el agua y el azúcar blanquilla y dejamos hervir unos cinco minutos. Retiramos del fuego y con la ayuda de unas pinzas o una cuchara vamos introduciendo los afajores en el almíbar. Y vamos disponiendo éstos sobre un plato.
Comprobamos que éstos no estén calientes y rebozamos en azúcar glass. Esperamos que se sequen un poquito y envolvemos en papel de seda, servilletas finas o papeles especiales para mantecados o polvorones como he hecho yo.
Es un dulce que no necesita horno, sencillo y rápido de preparar y lo mejor es que están espectaculares estos alfajores caseros.
Feliz jueves.