El pollo, ese gran aliado en las dietas, tiene la mala costumbre de acumular la poca grasa que tiene en la parte que más me gusta que es la piel y por consiguiente las alitas. Hasta en esto se cumple eso de que todo lo bueno engorda (tócate los webs). De verdad, deberíamos mirarnos esta obsesión con la operación bikini y disfrutar de la comida, que al fin y al cabo es lo que nos une a tí que me lees y a mi que cocino para que lo hagas...
Pues dicho esto, te vas a chupar los dedos con estas alitas y esta salsa que es una pasada. La combinación de naranja con brandy me encanta con el cerdo (Costillas de cerdo con naranja y brandy) por eso he probado algo parecido para hacer estas alitas, y ya no sé con cual quedarme!
Ingredientes:
- 1 kg. de alitas de pollo partidas
- 1 cebolla
- 1 diente de ajo
- 1 copita de brandy
- 1 vaso de caldo de pollo
- 1 naranja grande o 2 pequeñas
- aceite de oliva
- sal
Elaboración:
1. En una cazuela con un poco de aceite de oliva pochar la cebolla y el diente de ajo picados durante unos minutos.
2. Incorporar las alitas de pollo, limpias y troceadas y rehogar un rato hasta que pierdan el aspecto de crudas.
3. Añadir la copita de brandy y dejar a fuego fuerte unos minutos hasta que se evapore el alcohol.
4. Añadir el caldo de pollo y el zumo de la naranja exprimida. Dejar a fuego medio durante media hora aproximadamente hasta que se terminen de hacer las alitas y la salsa se haya consumido algo más de la mitad para tener el punto meloso perfecto.
Evidentemente también puedes hacer la misma receta con el pollo entero y no sólo con las alitas, pero tendrás que dejarlo más tiempo hasta que esté tierno.
¿Te apetecen?
¡Que tengas un finde estupendo, y nos vemos el lunes!
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