La tenía en borradores desde marzo y no le había dado salida. Ahora que se aproximan las navidades, la he rescatado porque me parece un entrante muy alegre y sano. Un poco laborioso, pero merece mucho la pena el resultado.
Podéis variar el caviar de tomate según vuestros gustos. Nosotros preparamos un zumo de tomate que aliñamos con tasbasco, salsa perrins y sal. Se puede preparar un Bloody Mary, o aderezar el zumo con vuestras salsas y aliños favoritos. Como más os guste.
¿Os animáis a prepararlo y contarme vuestras recetas? Os espero...
Dedicada, especialmente, a mi hermana Nuria y a mi cuñado Jose por su disponibilidad e inestimable ayuda en la elaboración de esta receta. Gracias chicos!!!
Ingredientes
500 ml zumo de tomate (aliñado al gusto)
5 grs de agar-agar
Anchoas en aceite
Perejil picado
Se necesitará además:
Agua fría
Hielo
Aceite
Barreño
Bol
Jeringuilla
Llevamos a ebullición el zumo de tomate con el agar-agar, removiendo constantemente para que se dehaga el agar-agar, no queden grumos y evitar que se pegue al fondo. Dejar enfriar unos minutos.
Preparamos un barreño con agua fría y hielo, y dentro de él ponemos un bol con aceite.
Llenamos una jeringuilla con el preparado de tomate y vamos haciendo gotitas. Las echaremos sobre el aceite a la vez que vamos removiendo el bol en círculos para evitar que se peguen las gotitas de tomate.
Las vamos retirando y reservamos para usarlas como más nos guste.
Nosotros preparamos unas cucharitas de caviar con anchoa espolvoreadas de perejil picado. Una auténtica delicia.