Hoy toca una receta diferente y muy curiosa.
Vamos a preparar un falso caviar de naranja que sera una maravilla para tus decoraciones.
Cuando uno escucha eso de falso caviar, le viene a la cabeza que debe ser muy complicado de realizar. Que debe ser algo de alta cocina solo a alcance de gente muy profesional y demás cosas así.
Pues no, no os preocupemos que vais a ver que cosa mas sencilla de preparar, y que vistoso quedara.
Además que podréis usarla en muchas elaboraciones. Para decorar mousse, tartas, hojaldres o incluso yo se las pongo a un simple yogur y le da un toque estupendo. Viereis que es un vicio una vez que las pruebes.
Bueno vamos por la receta, que seguro os esta picando la curiosidad de como se hacen, verdad?
Falso caviar de naranja
Ingredientes:
200ml. de zumo de naranja
2gr. de agar agar
Aceite de girasol
Colorante naranja (opcional)
1 jeringuilla
Elaboración:
Ponemos el aceite de girasol en un recipiente alto y ancho. Lo metemos media hora en el congelador, pues nos interesa que este muy frio.
Exprimimos las naranjas y colamos el zumo. Nos quedaremos con 200ml. del zumo.
Ponemos ese zumo en un cazo y le añadimos el agar agar y el colorante si lo vamos a utilizar. Removemos con unas varillas para que se disuelva todo.
Una vez disuelto lo llevaremos al fuego hasta que llegue a ebullición, removiendo de vez en cuando.
Cuando comience a hervir, lo tendremos 2 minutos en el fuego removiendo y apartaremos.
Lo dejaremos templar unos 4 minutos y llenaremos una jeringuilla o un biberón con el líquido.
Sacaremos nuestro aceite del congelador e iremos vertiendo en él la solución que tenemos en la jeringuilla gota a gota.
Iremos echándolas separadas para que no se junten. Veremos que al principio se quedan flotando y poco a poco se van hacia el fondo volviendo esferas que se depositaran en el fondo.
Tendremos que ir echando las gotas a buen ritmo para que no se nos enfríe la mezcla dentro de la jeringuillas, pues cuando lo haga se cuajara.
Si nos pasara, podemos calentarla unos segundos en el microondas y volverá a ponerse liquida.
El aceite se irá calentando con las gotas poco a poco y no saldrán bien las gotas si no está muy frio. Para evitarlo podéis poner el recipiente dentro de otro en el que pondremos agua fría con hielos, que hará que se mantenga la temperatura muy fría de nuestro aceite.
Dejaremos reposar las gotas en el fondo del aceite un rato para que se cuajen del todo. Las sacaremos con cuidado y las pondremos en un colador.
Con cuidado de que no les de directamente el chorro, las lavaremos con agua muy fría, para eliminarles el aceite.
Podremos usarlas directamente en cualquier elaboración o guardarlas en un bote hermético en el frigorífico. Para evitar que se resequen, pondremos zumo de naranja en el recipiente, así se conservaran estupendamente y listas siempre para usarlas.
Fuente: este post proviene de La Dulce Pasion de David, donde puedes consultar el contenido original.
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