Además, puede ser una excelente opción para que los más pequeños coman pescado, pues su sabor y textura se asemeja tanto al de la carne que no piensan que están tomando pescado, pero sí aprovechándose de todos los nutrientes que nos aporta y que son especialmente importantes en el desarrollo de los más pequeños.
Si lo acompañamos por una ensalada tendremos un menú completo, equilibrado y perfecto también si queréis cuidar la línea.
Ingredientes
-1 ó 2 lomos de atún por persona (puede ser congelado)
-2 ó 3 dientes de ajo
-Perejil picado
-aceite de oliva virgen extra
-sal
El atún fresco es ideal, pero a veces sale demasiado caro o no podemos ir a la pescadería ese día, por lo que los lomos de atún congelados pueden ser una opción excelente, por su precio y comodidad, pues si los descongelamos correctamente (en el frigorífico durante varias horas sobre una rejilla para que el agua que escurra no esté en contacto con el producto) conservan perfectamente todas sus propiedades.
Una vez descongelado el atún preparamos un majado con el aceite, los ajos, el perejil y un poquito de sal, ponemos estos ingredientes en el mortero y los machacamos procurando que emulsione el aceite. Untamos los lomos de atún con este majado por ambos lados y los dejamos reposar una hora.
Calentamos la plancha o sartén antiadherente y hacemos los lomos de atún, con 3-4 minutos por cada lado bastará porque si nos pasamos con la cocción quedará demasiado seco.
Si queréis podéis rociar los lomos de atún a la plancha con un chorrito de limón y un poquito de perejil picado por encima.
Como veis una receta muy sencilla, pero muy rica, que os sacará de un apuro en las noches más complicadas.
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