Bizcochitos de soletilla, el placer de lo sencillo

Adoro esos domingos tranquilos de primavera, en los que el tiempo discurre lento y no planificas nada especial. Remoloneas un poco más en la cama, te duchas sin prisas, desayunas despacio, pasas buena parte de la mañana en el jardín disfrutando del sol. Me encanta esta época del año con sus días largos que cunden para hacer más cosas.



No tenía pensado publicar nada este mes pero esta tarde, al regresar del paseo, se me antojaron unos bizcochos para acompañar un chocolate… y esta receta es tan fácil y agradecida que no da ninguna pereza ponerse el delantal. Los bizcochos de soletilla se preparan en un momento y solamente con estos ingredientes:

4 huevos

100 gr de azúcar

100 gr de harina

Una cucharadita de vainilla en polvo

Azúcar glas para espolvorear




Precalentamos el horno a 180º. Lo primero que haremos será separar las yemas y las claras de los huevos. Batiremos las primeras con dos cucharadas de azúcar y la cucharadita de vainilla en polvo, hasta que empiecen a blanquear. Después haremos lo mismo con las claras, que montaremos a punto de nieve firme con una pizca de sal y el resto del azúcar.

Mezclaremos después con movimientos envolventes para conservar todo el aire posible (es lo que dará esponjosidad a la masa) y haremos lo mismo al incorporar poco a poco la harina tamizada.

Con ayuda de una manga pastelera vamos formando líneas de masa, sobre una bandeja forrada con papel vegetal. Horneamos a 180º durante 15/20 minutos (el tiempo dependerá de cada horno).

El resultado… tiernos y deliciosos, ideales para “mojar”.



Os invito a prepararlos, siempre salen bien, y con estas cantidades obtendréis unas tres docenas aproximadamente. Espero que os gusten

Tiernos y esponjosos

“Bizcochitos de soletilla, el placer de lo sencillo” también está disponible en audio en ivoox.

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