Los ingredientes de este bizcocho son muy accesibles, y solemos tenerlos en casa: mantequilla, azúcar, huevos y harina. Su sabor es especial y nos transporta a la niñez, y al recuerdo de ese olor a bizcocho que inundaba toda la casa.
Este bizcocho debe tomarse al día siguiente de la elaboración , pero os aseguro que la espera merece la pena. ¿Os apetece un trozo de rico bizcocho?
4 huevos grandes
El mismo peso de los huevos en harina de repostería
Misma cantidad del peso de los huevos en mantequilla a temperatura ambiente
175 gramos de azúcar
1 cucharadita de levadura Royal
La ralladura de un limón
Una pizca de sal
En primer lugar precalentamos el horno a 180 grados y engrasamos el molde (yo he utilizado uno de silicona, pero en caso contrario enharinar o cubrir con papel vegetal),
A continuación pesamos los huevos sin cáscara, poniendo un bol de plástico sobre la jarra.
Ahora echar en la jarra la mantequilla con el azúcar y batir 1 minuto velocidad 5.
Después programamos otro minuto, velocidad 5 y vamos echando de uno en uno los huevos.
Luego echamos la harina tamizada con la levadura y la ralladura de limón y programamos 1 minuto y medio velocidad 5.
Finalmente echamos en el molde y horneamos durante 40-50 minutos, y tras comprobar con un palillo que está completamente cocido, dejamos enfriar durante 10 minutos antes de desmoldar.
Para terminar, envolver en una bolsa de plástico o film durante 24 horas, y después sólo nos queda disfrutar de este magnífico bizcocho
Precalentamos el horno a 180 grados y engrasamos el molde (yo he utilizado uno de silicona, pero en caso contrario enharinar o cubrir con papel vegetal),
A continuación pesamos los huevos sin cáscara.
Ahora echar en un bol la mantequilla con el azúcar y batir a mano o con batidora de varillas .
Después vamos echando de uno en uno los huevos y seguimos batiendo hasta que la mezcla este blanquita.
Luego echamos la harina tamizada con la levadura y la ralladura de limón y mezclamos con movimientos envolventes.
Finalmente echamos en el molde y horneamos durante 40-50 minutos, y tras comprobar con un palillo que está completamente cocido, dejamos enfriar durante 10 minutos antes de desmoldar.
Para terminar, envolver en una bolsa de plástico o film durante 24 horas, y después sólo nos queda disfrutar de este magnífico bizcocho
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