Sigo probando recetas con Kefir, pues su sabor intenso y ácido
me parece un excelente contrapunto al azúcar en los postres.
Este bizcocho me salió rico y las fresas frescas le dan un toque fresco
y jugoso, muy bueno.
Como comenté en la receta anterior, si no tenemos Kefir, podemos sustituir con
yogur natural.
Ingredientes para un bizcocho de 18 cm (6 a 8 porciones):
100 de harina
30 gramos de almendras molidas
1 cuchara de café de levadura o polvo de hornear
1/4 de cuchara de café de sal
30 gramos de mantequilla derretida
125 gramos de azúcar
1/2 cuchara de café de extracto de vainilla
1 huevo
125 ml de kefir
1/2 taza de fresas troceadas
1 cuchara sopera de avena para espolvorear
Mezclamos la harina con las almendras, la sal , la levadura y el azúcar.
Batimos el huevo con la vainilla, añadimos el kefir y la mantequilla derretida.
Mezclamos los líquidos a la mezcla de harina, solo lo suficiente para que la mezcla no tenga grumos.
En eso punto, echamos las fresas y mezclamos lo justo para que se incorporen a la masa.
Untamos un molde de tarta con mantequilla y harina, echamos la masa del bizcocho y espolvoreamos con los flocos de avena.
Horneamos el bizcocho a 180º por 35 a 40 minutos,
hasta que esté dorado por fuera y cocido por dentro.