Este mes las pantallas se tiñen de verde y un resfrescante sabor y un ligero toque ácido inunda la blogosfera. Este mes cocinamos con kiwis, porque así lo eligió Isabel del blog "Gotas de Azúcar y Vainilla".
Es una fruta muy saludable y con un alto valor nutritivo que se puede encontrar en el mercado durante todo el año y que deberíamos incorporar diariamente en nuestra dieta, por una serie de razones:
Es rico en vitamina C, mucho más que los limones y las naranjas.
Facilita la digestión.
Tiene un alto contenido en fibra, que facilita al tránsito intestinal.
Es una fruta baja en calorías, 57 Kcal por 100 gr.
Aporta ácido fólico al organismo.
Hay dos variedades el "green" con una pulpa de color verde intenso y el "gold" con una pulpa de color dorado y sabor dulce y tropical. Yo suelo comprar el verde porque me gusta más su sabor pelín ácido y lo tomo todos los días en el desayuno.
En esta ocasión, he preparado un bizcocho tipo pound cake con kiwis en su interior y un glaseado de queso crema y limón.
Visto así, recién horneado, pero sin el glaseado, no dice mucho, pero no os dejéis engañar. Aparte de ser un bizcocho húmedo y que incluso sin ningún tipo de fruta tendría un sabor delicioso por su sabor a mantequilla y vainilla, los trocitos de kiwi esparcidos por la masa le aportan un sabor espectacular y diferente.
El remate por supuesto, lo pone el queso y el kiwi de la cobertura, que siempre ayuda a que la mezcla de sabores sea si cabe más deliciosa.
Ingredientes
Para el bizcocho
200 gr. de harina
2 cucharaditas de levadura
180 gr. de azúcar
170 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
3 huevos tamaño L
1 cucharadita de extracto de vainilla
2 kiwis pelados y cortados en cuadraditos
Para el glaseado
100 gr. de queso crema
Ralladura de 1 limón
120 gr. de azúcar glacé
1 kiwi y medio cortado en rodajas
Precalentamos el horno a 180º C.,
Engrasamos un molde de plum cake y lo forramos con papel vegetal.
En el vaso de una batidora de pie tamizamos la harina con la levadura. Agregamos la mantequilla, el azúcar, los huevos, la vainilla y batimos bien hasta que no queden grumos. A continuación agregamos la mitad de los kiwis troceados y mezclamos con la ayuda de una espátula.
Vertemos la mezcla en el molde y alisamos la superficie. Distribuimos el resto de kiwi troceado por encima.
Horneamos 1 hora y media o hasta que insertando un palito en el medio, éste salga limpio. Si vemos que se dora mucho la parte superior, podemos protegerla con un trozo de papel de aluminio.
Dejamos 10 minutos en el molde y posteriormente desmoldamos y dejamos el bizcocho sobre una rejilla para que se enfríe por completo.
Para preparar el glaseado, batimos el queso crema con la ralladura de limón y el azúcar glacé hasta que consigamos una crema homogénea.
Extendemos la crema por la parte superior del bizcocho y adornamos con unas rodajas de kiwi.
Ya he recibido alguna de vuestras propuestas y me encantan. Deseando estoy de ver todas las recetas participantes en el reto de este mes.