Siempre en busca del bizcocho perfecto, seguro que esta es una máxima en muchas cocinas. A mí me encanta hacer bizcochos y en este post te comparto un montón de trucos y consejos para que te quede perfecto. Este bizcocho sin aceite ni mantequilla, y que te servirá como base para tus tartas, queda muy tierno y esponjoso. Seguro que te ha sorprendido que no lleve ninguna grasa como aceite ni mantequilla, pero más te sorprenderá lo jugoso que queda gracias al yogur. Lee hasta el final si quieres enterarte de todos mis trucos y consejos y te aseguro que te quedará un bizcocho de 10.
Ingredientes
300 g de harina de trigo ( 2 tazas y 1/4)
300 g de azúcar (1 taza y 1/4)
250 ml de yogur natural (1 taza)
6 huevos tamaño L
10 gramos de levadura química o polvo de hornear
4 gramos de sal
1 limón
Ingredientes para preparar Bizcocho de yogur esponjoso sin aceite ni mantequilla. Increíblemente fácil.(Trucos y consejos) Bizcocho de yogur esponjoso sin aceite ni mantequilla. Increíblemente fácil.(Trucos y consejos): videoreceta
Bizcocho de yogur esponjoso sin aceite ni mantequilla. Increíblemente fácil.(Trucos y consejos): preparación de la receta
1.- Prepara el molde. Forra el molde con papel de horno. Coloca el papel en la base y recorta el sobrante. Engrasa bien todo el molde con un spray o con mantequilla. He utilizado un molde desmontable de 26 centímetros y, como la pared es bastante más baja que el que suelo usar, he forrado con papel de horno también la pared del molde. Engrasa también el papel que cubre la pared del molde.
2.- Enciende el horno a 175 grados con calor arriba y abajo.
3.- Separa en dos recipientes diferentes las claras y las yemas. Añade una pizca de sal a las claras y bate con las varillas eléctricas o, en su defecto, con unas varillas manuales. Cuando las claras blanqueen (a mí me ha costado aproximadamente un minuto y medio), añade la mitad del azúcar y sigue batiendo hasta obtener el punto de nieve (yo he estado batiendo aproximadamente 5 minutos). Si lo haces con unas varillas menos potentes o con una manual te costará más, pero también se puede conseguir. Las tendrás al punto de nieve cuando veas que se dibuja el trazo. Reserva las claras.
4.- Añade el yogur y el resto del azúcar a las yemas. Añade también la ralladura de la piel un limón. Es importante que solo ralles la parte amarilla del limón. Bate la mezcla con velocidad baja para que no salpique. Cuando la mezcla se vuelva espumosa, añade la harina. Mezcla la levadura y polvo de hornear con la harina e incorpórala a las yemas a través de un tamiz. Bate de nuevo hasta que quede bien mezclado.
5.- Incorpora las claras a las yemas en varias veces y con movimientos envolventes hasta que quede bien mezclado. Vierte la mezcla en el molde. Da un par de golpecitos al molde para que se asiente la masa.
6.- Introduce el bizcocho en el horno. Lo he colocado en el segundo de los 5 niveles que tiene mi horno, a 175 grados, con calor arriba y abajo, programando mi horno a 45 minutos. Pasado este tiempo, abre el horno para ver cómo va el bizcocho. Da unos golpecitos y si la superficie tiembla significa que sigue crudo. Déjalo en el horno durante 10 minutos más. Comprueba pasados los 10 minutos si el bizcocho está listo. Pincha con un palillo a ver si sale seco y si está doradito por arriba. Yo lo he dejado 5 minutos más porque no se había dorado. Tras 60 minutos en total, el bizcocho está doradito por arriba y al pincharlo con un palo sale completamente limpio.
7.- Desmolda el bizcocho. Abre el molde y retira el papel. Colócalo en una rejilla hasta que enfríe.
Trucos para preparar el Bizcocho de yogur esponjoso sin aceite ni mantequilla:
Uno de los secretos de la esponjosidad del bizcocho es separar claras y yemas y darles un buen batido.
No llenes más de las tres cuartas partes del molde porque el bizcocho puede crecer y se te puede derramar. Si te ha sobrado masa porque tu molde es más pequeño puedes ponerla en una taza, la llenas hasta la mitad, y llevarla al microondas durante 1 minuto. Puedes ir haciendo bizcochos en taza al microondas hasta que acabes la masa. También puedes poner unas cápsulas de magdalenas y hacer una hornada .
En cuanto a los ingredientes, es preferible que los tengas a temperatura ambiente. En este caso tenemos yogur y no vamos a esperar dos horas a que se atempere. Los huevos sí que nos interesa que estén a temperatura ambiente.
El bizcocho hay que desmoldarlo justo cuando lo sacas del horno para que no se humedezca.
Es muy importante controlar la temperatura del horno. Hacer un bizcocho no es una temperatura exacta y siempre igual. Cada horno es diferente y puede que tú tengas que hornearlo a más o menos temperatura. Me encantaría poder darte la temperatura exacta pero tendrás que averiguarlo tú mismo.
El bizcocho, cuando sale del horno, siempre encoje un poquito y en la superficie se hacen unas arrugas. Si eso no te gusta, puedes darle la vuelta y presentarlo volteado.
Lo mejor para cortar el bizcocho es hacerlo cuando esté bien frío y con un cuchillo de sierra como el que utilizas para cortar el pan y así obtendrás un corte muy limpio.
Mi recomendación:
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Fuente: este post proviene de Anna Recetas Fáciles, donde puedes consultar el contenido original.
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